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ALDAMA, Chis, a 28 de mayo de 2018.- Más de mil 300 indígenas tzotziles, en su mayoría niños, de cinco comunidades de esta localidad; se encuentran desplazados con escasez de alimento, sin atención médica y medicina, viviendo en la cancha techada de la comunidad Xuxchen por conflictos territoriales con el poblado Santa Martha, del municipio de Chenalhó; que cobró la vida de tres personas el 2 de abril del presente año.
En el campamento de Xuxchen se resguardan casi un millar de indígenas, en su mayoría niños lactando enfermos de gripa y diarrea, menores adolescentes, mujeres, adultos mayores y hombres.
A unos cinco kilómetros, se ubica un segundo campamento en el paraje Tabak, donde los desplazados no tienen alimento, duermen entre los cafetales, sin colchonetas y cobertores; donde son atacados por zancudos y a merced de animales.
De acuerdo al representante de los desplazados, Cristóbal Santiz, el conflicto territorial data del año 1975, ya que de acuerdo al plano de tierras comunales las 60 hectáreas pertenen a sus abuelos, y en esa fecha se firmó un convenio reconciliatorio para que se respete lo que marca el plano.
Posteriormente, en 1995 se actualiza el convenio reconciliatorio; pero en el 2008 comuneros de Santa Martha interponen una demanda ante el Tribunal Unitario Agrario que, en el año 2009, se firma el convenio definitivo en que las 115 familias de Aldama continúen con la posesión y el usufructo de las 60 hectáreas de tierra.
Mientras se ordena la indemnización de un millón 300 mil pesos a los pobladores de Santa Martha. Para el año de 1998, el Congreso del Estado aprueba el proceso para la creación de nuevos municipios y Aldama se separa de Chanalhó y se erige como nuevo municipio, conformado con 21 comunidades, contando actualmente con más de ocho mil pobladores.
El conflicto se reactiva en el año 2014, cuando comuneros de Aldama niegan a los de Santa Martha el aprovechamiento de un manantial de agua; por lo que, en represión provocan daños en siembras de cafetales y al sistema del suministro del vital líquido.
El ataque contra la población se recrudece en el 2016 con la quema de siete viviendas, la destrucción de plantaciones de café, tala de árboles y el desplazamiento forzado de los indígenas al ser sacador a la fuerza por un grupo armado.
Las reuniones entre el gobierno de Chiapas y las partes en conflicto para llegar acuerdos han sido nulas y la agresión con armas de fuego han ido en aumento, explica Cristóbal Santiz, quien recordó que en el mes de abril fueron asesinados Manuel Gómez Pérez, de 35 años de edad, y sus hijos Alonso y José Antonio Gómez Hernández, de 17 y 11 años de edad, respectivamente, al ser alcanzados por las balas que disparan el grupo armado de Santa Martha, cuando caminaban a la comunidad de Cotzilnám a Juxtán a trabajar sus parcelas.
Señaló que a partir de este año, el hostigamiento con armas de fuego se amplió contra las comunidades de Coco, Tabak, Cotzilnam, Xuxchen y Tzelejpobtic, provocando el desplazamiento forzado de los tzotziles.
Como estrategia para evitar perder la vida, los indígenas optaron por juntarse y resguardarse en la comunidad Xuxchen; ubicada a unos ocho kilómetros de la cabecera municipal de Aldama, realizando un recorrido de aproximadamente, media hora en carro por camino de terracería, en medio del bosque.
De acuerdo al agente rural municipal de Xuxchen, Santos Gómez López los desplazados sobreviven con escases de alimento, debido a que no han podido trabajar sus tierras para la siembra de fríjol y maíz, principal consumo de los tzotziles, y no cuentan con recursos económicos debido a que sus cafetales fueron destruidos.
“Necesitamos que nos ayuden con médicos, medicinas, colchonetas, cobertores y alimento para los niños y las mujeres, que son los que más sufren”, señala la autoridad rural.
El presidente municipal de Aldama, Marcelino Patishtán, explicó que el dinero ha sido insuficiente para alimentar a los más de mil 300 desplazados. “Compré un poco de fríjol y maíz, pero ya no hay dinero. Ya solicité despensas a Protección Civil pero no me han dado respuesta”, señala el alcalde.
Refiere que también solicitó a la Secretaría de Gobierno les otorguen láminas para construir campamentos, debido a que ya viene la época de lluvia y hay personas viviendo entre el monte, pero tampoco le han resuelto.