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CIUDAD DE MÉXICO, 20 de junio de 2018.- El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, lanzó mensaje fuerte contra la política migratoria implementada por Estados Unidos y su presidente Donald Trump, quien está separando familias en una clara violación de los derechos humanos, por lo que, aseveró que las niñas y niños no deben ser moneda de cambio en las negociaciones políticas o económicas, pues esta postura degrada la calidad de las personas.
“Las niñas, niños y adolescentes, no pueden ser moneda de cambio en negociaciones políticas o económicas, adoptar una perspectiva así, niega todo el respeto a la dignidad humana, y degrada a las personas a la calidad de objeto. El costo del muro que se pretende construir y los acuerdos comerciales que se quieren alcanzar, no debe ser el dolor y el sufrimiento de nuestras niñas y niños ni la negación de nuestra dignidad como personas”, enfatizó.
Durante la celebración del Día Mundial de los Refugiados, realizado en la Secretaría de Gobernación (Segob), donde se entregaron cédulas de registro de población temporal para extranjeros a personas de Venezuela, Honduras, Guatemala, entre otros, que solicitaron refugio en México, el ombudsman señaló que es momento de que México mande un enérgico mensaje de respeto a los Derechos Humanos y rechazo a políticas que fomentan odio y discriminación.
“En la coyuntura regional que vivimos en materia migratoria, donde hay acciones de crueldad al separar a los miembros de las familias y dejar en el desamparo a miles de niños, es momento para que desde México enviemos un mensaje de respeto a los Derechos Humanos de quienes aspiran a una vida mejor, y rechacemos de una vez por todas las políticas migratorias que fomentan el odio y la xenofobia, la discriminación y la criminalización de la comunidad migrante”, sostuvo.
González Pérez hizo un llamado a sus pares en la región americana, así como a organismos internacionales dedicados a la protección y defensa de los derechos humanos, a formar un frente común por el respeto de los derechos que tienen las personas migrantes en los Estados Unidos, y que hoy están siendo violados, pues aseguró que no solo basta la denuncia, sino que también hay que actuar.