Ordenamos la casa, dice Alfonso Sánchez García en informe de 100 días
TLAXCALA, Tlax., 31 de enero de 2019.- Estudiantes normalistas, ciudadanos de Ixtenco, maestros cesados, y de estancias infantiles irrumpieron la salida del Presidente de México a bordo de su vehículo, en el Centro Expositor de la capital.
Con peticiones de que cumpla su palabra y atienda los conflictos en municipios y sectores sociales, los inconformes, colocaron mantas y cartulinas para darle a conocer a López Obrador su situación al inicio de su sexenio.
Los primeros en apostarse fueron los pobladores de Ixtenco quienes exigieron la disolución del cabildo, desde el alcalde, Miguel Ángel Caballero Yonca, hasta los regidores, ya que en este mes de febrero diputados locales decidirán si procede o no la desaparición de podere.
Los siguientes en llegar fueron las estudiantes normalistas de la Normal Rural “Lic. Benito Juárez” quienes exigieron el respeto a la matrícula de 342 espacios en la institución para el próximo ciclo escolar.
Posteriormente y al momento de salir la camioneta del Presidente Andrés Manuel López Obrador, los docentes cesados de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se apostaron frente a la camioneta con cartulinas, e incluso uno de ellos lo tomó de la mano para pedirle que cumpla su palabra de regresarles su espacio laboral y por espacio de dos minutos le explicó la situación actual de los docentes en estas condiciones.
“Yo voté por usted y confío que nos dará solución” le aseguró el maestros quien no soltaba la mano de López Obrador ante la mirada nerviosa de funcionarios de la ayudantía presidencial; a lo que tuvo como respuesta del Presidente “sí los voy a ayudar y sí habrá solución”.
La turba llegó hasta el puente del Trébol donde tocó turno a las maestras de estancias infantiles quienes le pidieron respuesta a sus pagos pendientes de este mes en estos espacios, que opera la ahora Secretaría del Bienestar, encabezada por Lorena Cuéllar Cisneros.
Finalmente la camioneta avanzó entre personas que le entregaban peticiones en sus manos.