Buscarán comerciantes de Tlaxcala regularización de licencias en 2025
TLAXCALA, Tlax., 26 de noviembre de 2016.- Al anuncio de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), que propuso incrementar de 73 a 89.35 pesos el salario mínimo, festejó que haya partido del sector privado una propuesta de tales dimensiones, pero no captó desde su perspectiva, que el gobierno federal perdió la oportunidad de haber hecho una propuesta para incrementar el salario mínimo con la misma agresividad.
Pero como parece que Navarrete Prida tiene el objetivo de contener los salarios mínimos, sin ningún rubor, declaró: “Sí celebro que se presente ya una propuesta y que caminemos hacia allá diciendo que tendrá que ser de consenso, tendrá que ser tripartita para que no pegue en los salarios contractuales y entonces tengamos una conflictividad social muy grande en materia laboral. Un incremento al salario sin consenso entre todas las cámaras empresariales, sindicatos y gobierno, provocaría conflictividad laboral”.
“Quiero escuchar a otras organizaciones empresariales. En principio creo que está claro que no tendría que ser de golpe (el aumento), lo tenemos que hacer gradual y tenemos que ir midiéndolo (…) celebro que los empresarios se pronuncien aceptando en principio la necesidad de que tenemos que ir hacia adelante en los salarios mínimos”, expuso.
Navarrete Prida dijo que el consenso tripartita es necesario para evitar que las empresas aumenten los precios de los productos y esto descuente en automático el aumento salarial de los mínimos, “de nada serviría hacer algo virtuoso”.
En entrevista al término de la presentación del libro “El trabajo doméstico en México: La gran deuda social”; donde pronunció un discurso se refirió brevemente al tema salarial, exclamó: “Ahora resulta que las propuestas altas vienen del sector patronal”.
Al evento acudió el presidente de la Conasami, Basilio González, quien dijo de manera muy breve que la Comisión está próxima a instalarse en sesión permanente, lo que podría ser el último día de noviembre o el primero de diciembre.
El incremento, dijo el funcionario que no ha destacado precisamente por defender los salarios de los trabajadores desde el gobierno federal, podrían generar conflictos laborales; los salarios tampoco son defendidos por los sindicatos, porque esta vieja estructura corporativa mexicana ha generado que los líderes, que se imponen arbitrariamente, sin voto de por medio, se convierten en millonarios en corto tiempo, porque negocian con las empresas los bajos salarios.
Llamó la atención que Navarrete Prida no saliera de su sorpresa: “Estamos viviendo un mundo al revés: ahora resulta que las propuestas altas vienen del sector patronal”, señaló durante su discurso.
Por su parte, en entrevista en el noticiario de Víctor Piz en El Financiero-Bloomberg, Gonzalo Hernández Licona, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), validó la propuesta de un incremento del salario debido al estancamiento de los ingresos en los últimos años, pero dijo que también debe cuidarse que un aumento no se traduzca en inflación.
Añadió que el Coneval ha sugerido en diversas ocasiones que un aumento al mínimo puede iniciar con un alza en pesos, y no porcentual, propuesta que retoma la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, explicó en entrevista por separado con El Financiero-Bloomberg que el aumento al mínimo será en dos fases: una porcentual con un aumento entre 4 y 4.5 por ciento en diciembre para todos los salarios y uno nominal que consiste en incrementar 13.50 pesos al salario mínimo vigente a partir del primero de enero de 2017 para alcanzar los 89.35 pesos al día.
En tanto, Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), dijo en entrevista radiofónica con NRM Comunicaciones que el aumento salarial debe verse “con mucha prudencia” y mencionó que el tema se ha discutido desde hace seis meses desde la óptica de no repercutir en la inflación ni en los contratos colectivos.
“Tenemos que estar muy conscientes de que dadas las condiciones actuales de la economía, lo principal que tenemos que buscar es que la inflación no suba (…) Tenemos que ir creciendo, primero, en el aumento en los salarios en lo general, que será ahora durante el mes de diciembre y, segundo, tiene que terminarse la separación de la UMA del salario mínimo”, apuntó.
Salomón Chertorivski, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) de la Ciudad de México dijo en entrevista radiofónica que la propuesta de Coparmex “es el primer paso para llegar a la canasta alimentaria, pero si queremos cumplir con el mandato constitucional”.
Por otro lado, Carlos Aceves del Olmo, secretario general de la CTM, propuso que el salario mínimo se incremente a 100 pesos diarios y consideró que esa alza no sería inflacionaria.
Esta fue la controversia que se generó un día después de la propuesta de Coparmex para incrementar el salario mínimo, que es el más bajo en América Latina. Esa es una de las ofertas que tienen las empresas extranjeras para venir a instalarse en territorio mexicano: mano de obra barata y, en consecuencia, bajo nivel de vida para los mexicanos, bajo crecimiento de la economía nacional, débil mercado interno, porque no hay salario que alcance