Usan playera de Santa Muerte para polémica en Senado
TLAXCALA, Tlax., 12 de julio de 2017.- Esta tarde en la toma de compromiso del comité directivo 2017-2018, de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), en Tlaxcala misma que contó con la presencia de Gustavo de Hoyos Walter, coordinador nacional, señaló que en la lucha contra el flagelo de la corrupción no hay soluciones mágicas ante un mal que se ha multiplicado ya no sólo en las instituciones gubernamentales, sino en todos los niveles de gobierno.
Señaló que entre los retos a enfrentar como país en materia de competitividad, desarrollo inclusivo y empresarial, educación, entre otros, el más importante por su transversalidad es el desarrollo, el bienestar del país y el estado de derecho desde la seguridad pública, la certeza jurídica, la transparencia y rendición de cuentas contra la corrupción y la impunidad que han representado un desafío para México, subrayó.
«Aquí no hay soluciones mágicas, este gran flagelo que tenemos en el país que se llama corrupción (…) que desafortunadamente se nos ha venido multiplicando. Hace algunos años podíamos focalizarlo en algunas áreas de algún gobierno, en la formación política en partícular, hoy ha crecido y transversalmente esta presente en gobiernos municipales, estatales o el federal, lo mismo en el norte como en el sur del país y ha tomado carta no solo en poderes ejecutivos, sino en los poderes legislativo y judicial», comentó De Hoyos Walter, durante su discurso.
Por ello hizo un llamado a que la agenda a desplegar en materia debe ser de profundidad pues a partir del 2014 donde se elevaron los hechos de corrupción en altos niveles de gobierno, donde calificó que las «campañas justicieras» en un supuesto intento por cortar de tajo la corrupción no son tales, resultando arbitrarias y sin respeto al estado de derecho.
Reconoció que el mandato constitucional para la conformación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) desde el 2015, ha avanzado pese a sus eventualidades e indicó que en la lucha contra la corrupción, ha sido un catalizador de la movilización ciudadana más importante de los últimos 50 años pues una iniciativa de ley ciudadana nunca antes tuvo la capacidad de detonar un mecanismo constitucional para darle al país una nueva ley en materia de responsabilidades administrativas.
De este modo argumentó que el SNA es una pieza del andamiaje jurídico que, pese a no ser perfecto, ha permitido construir un proyecto a futuro de como combatir la corrupción.