Detienen a 7 personas y aseguran 600 kg de droga en cateos en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de agosto de 2017.- La Procuraduría General de Justicia capitalina reunirá los datos de prueba para que un Juez de Control vincule a proceso a un hombre de 33 años, acusado de robar este sábado una joyería en la estación Salto del Agua, del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.
El presunto ladrón fue detenido por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, luego de que amenazó con prender fuego a las empleadas si se oponían al hurto.
Efectivos de la Policías Bancaria e Industrial (PBI), adscritos a los sectores F y U, comisionados al STC de la Línea 1, capturaron al individuo, luego de que entrara al local con un encendedor y una botella con líquido color blanco, misma que cubría con un guante.
Con palabras altisonantes roció la sustancia a las dependientas y les exigió que entregaran la mercancía de los aparadores, con un valor de 80 mil pesos, o de lo contrario les prendería fuego.
En ese momento personal de la PBI fue alertado de la situación e inicio la persecución del sujeto, quien llevaba artículos de la joyería, logrando su detención metros adelante.
Conforme al protocolo de actuación policial, al imputado se le comunicó el motivo de su detención, así como su derecho a guardar silencio, contar con un abogado y enterar a algún familiar de su captura.
Una vez que los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México detuvieron al hombre de 33 años, éste quedó a disposición del agente del Ministerio Público de la Agencia Central de Investigación, donde se inició una carpeta de investigación por el delito de robo agravado calificado.
Al indiciado se le aseguró la joyería que hurtó de los escaparates de la tienda, la botella con un líquido color blanco con el que amedrentó a las víctimas, un guante, una gorra y un encendedor.
Como parte de las diligencias practicadas, se recabaron las entrevistas de las afectadas, quienes reconocieron al imputado como la misma persona que ingresó en el establecimiento, las amenazó y robó la mercancía.
El representante social dio intervención a peritos especialistas en criminalística, fotografía, identificación y valuación —con la finalidad de conocer el valor de lo robado—, dando continuidad a las investigaciones para comprobar la responsabilidad del hombre en estos hechos.
Por su parte, peritos en química analizan el líquido contenido en el envase, para conocer si se trata de una composición combustible que hubiera podido dañar físicamente a las afectadas.
Con los datos de prueba, el representante social solicitará audiencia inicial ante un Juez de Control, para que vincule a proceso al indiciado y le imponga una medida cautelar.
De encontrarse penalmente responsable de este ilícito, el imputado podrían alcanzar una pena de hasta 10 años de prisión.