Consumo de los trabajadores mexicanos esencial en EU
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de octubre de 2017.- Al condenar la masacre ocurrida en Las Vegas, Nevada, donde murieron casi 60 personas y más de 500 resultaron heridas, la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte del Senado de la República manifestó su profunda preocupación por la proliferación de armas y arsenales en posesión de sujetos dispuestos a utilizarlas en contra de la sociedad.
La presidenta de este órgano técnico legislativo, Marcela Guerra Castillo, exhortó a los legisladores de Estados Unidos a considerar el debate serio y urgente de todas las iniciativas ingresadas en el Congreso de su país sobre el control y la venta de armas.
En un asunto no inscrito en el orden del día, la senadora del PRI emitió un pronunciamiento sobre los acontecimientos ocurridos la noche del 1 de octubre y dijo que corresponde a la sociedad estadounidense reflexionar sobre la frecuencia con la que estos hechos atentan contra los valores universales como la libertad, diversidad y la paz.
Conminó al consulado de México en Las Vegas para que continúe dando seguimiento a las investigaciones e identificar a connacionales que hubieran resultado afectados y, en su caso, aplique el protocolo correspondiente de protección y asistencia.
Guerra Castillo señaló que el recrudecimiento de la violencia puede estar asociado a la inclusión de discursos de odio, así como a llamados de grupos extremistas, sobre todo, en el marco de una segunda enmienda constitucional que se refiere al derecho de ese pueblo de poseer y portar armas.
Al expresar sus condolencias a los familiares de todos los que perdieron la vida en estos hechos, la senadora del PT, Dolores Padierna Luna, coincidió que el problema no está sólo en el individuo que se ha convertido en asesino múltiple, sino en el enorme mercado de armas y la posibilidad de que los ciudadanos puedan adquirirlas sin mayores complicaciones.
El mercado de armas representa un problema para México, pues más del 80 por ciento del armamento que tienen los grupos criminales en el país provienen de Estados Unidos y el incremento del trasiego de armas también tiene un correlativo en el incremento de hombres y mujeres asesinados al amparo de una violencia sin fin, mencionó.
Desde el Senado de la República, insistió en la necesidad de presionar y exportar a los congresistas norteamericanos a que modifiquen su industria criminal armamentista.
La senadora del PRD, Angélica de la Peña Gómez, expresó que es necesario volver a insistir en que el congreso norteamericano controle la venta de armas, ya que México también es víctima de la industria armamentista norteamericana.
Se trata del ataque más letal del que se tenga memoria en el vecino país Norteamericano, por lo que la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte manifestó la solidaridad de su grupo parlamentario y del Senado al pueblo estadounidense.