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Morelia, Mich., 6 de octubre, 2017.- El Congreso de Zacatecas aprobó una iniciativa para evitar que los padres pongan a sus hijos nombres peyorativos que puedan ocasionar que lleguen a ser víctimas de bullying; la diputada local Isadora Santivañez se refirió a nombres que le suenan extraños como Nikté y Atzimba, el primero de origen maya y el segundo purépecha.
La iniciativa señala que los oficiales del Registro Civil deben orientar a los padres para evitar que elijan nombres para sus hijos, que sean considerados como discriminatorios o peyorativos.
De entrada no está mal iniciativa, pues se sabe de casos de niños a quienes le han puesto “Aniv de la Rev” porque nacieron un 20 de noviembre; “Superman”, “Leididi” o “Gokú”; el problema es el criterio que se emplearía para determinar cuáles nombres serían aceptados y cuáles no.
Y es que si va a ser al criterio de la diputada, algunas personas que conozco empezarían a avergonzarse de su nombre, como es el caso de Atzimba, que representa a una princesa purépecha y que no tiene nada de discriminatorio ni peyorativo.
Tal vez en la cultura de Zacatecas haya nombres que a los michoacanos también nos parezcan raros, pero no por eso tendrían que ser vetados.
Insisto, no está mal que nuestros legisladores se preocupen por los niños en cuanto a un tema esencial como lo es el nombre que los identificará siempre, pero el asunto es que no se trata de ocurrencias, sino que las propuestas deben hacerse con un conocimiento previo y con un mejor criterio.