Capturan en Durango a exregidor de Metepec acusado de violación
orelia, Mich., 28 de noviembre de 2017.-Este cierre de año será difícil para la mayoría de los michoacanos. El dinero cada vez circula menos; la universidad nicolaita no cuenta con recursos para concluir 2017; los maestros siguen peleando pagos y bonos que fueron comprometidos y que no les han llegado.
La burocracia de los tres poderes del estado también está molesta porque Pensiones Civiles prestó casi 400 millones de pesos al gobierno estatal que no ha pagado. Mientras que contratistas y prestadores de servicio también están rezagados por la falta de pago.
Lo único que salva la crisis son las remesas que llegan de Estado Unidos, así como lo que genera el comercio, el campo, las empresas privadas y los prestadores de servicio.
A nivel federal, está ocurriendo lo mismo, la situación se complicó con los sismos de septiembre; y todo lo que implica la subida del dólar; el rezago que se ha generado en la producción de petróleo; los altos intereses que se pagan por la deuda pública, entre otras.
No importa que el secretario de Relaciones Luis Videgaray haya declarado héroe nacional a José Antonio Meade, quien seguramente será el candidato del PRI a la presidencia de la República. Lo más irónico es que no hay vergüenza por parte de la mayoría de los políticos que se niegan a dejar la ubre a pesar de haber recibido tantos beneficios.
Es obvio que Meade y casi todo el gabinete federal son parte de la tragedia nacional. A través de los medios, el gobierno pretende generar el boom sobre destapes, alianzas, independientes, pleitos entre partidos, cuando la realidad exige un gobierno comprometido, sobre todo cuando la inseguridad ha vuelto a ser tema, ya que este 2017 rebasa el número de muertos de cualquier año de la administración de Felipe Calderón.
Lo peor de todo es que después de tanto ruido, lo más seguro es que nos apliquen nuevamente la misma medicina.