Mawiso será el nombre del nuevo Museo del Carnaval de Tlaxcala
APIZACO, Tlax., 08 de Octubre de 2017.- Hubo en todo en la corrida a favor de la iglesia de San José, toros buenos y malos, lucidos pases, bronca para el juez, pero sobre todo buen ánimo de la familia taurina para mostrar su solidaridad tras los temblores de septiembre, demostrado su arte y afición a favor de la reconstrucción de uno de los templos emblemáticos en la capital del estado.
El festejo inició con un minuto de silencio en el paseíllo, como homenaje a los ganaderos Victorino Martin y Jaime Rodriguez, quienes fallecieron en la semana que concluyó.
Con dos cuartos de entrada, el primero de la tarde “Rescatista”, de la legendaria ganadería de Piedras Negras, saltó al ruedo con 450kg, un toro negro con cuerpo, que fue recibido por Jerónimo Aguilar con una tanda de verónicas, una brega a la puya en la que el toro acudió alegre al capote.
Vendría después un tercio de banderillas accidentado, ya que en el caballo el toro perdió fuerza, lo que complicó su recorrido.
Brindis al público por parte de Jerónimo, quien logró a pesar de la incomodidad del viento, meter al toro en la muleta dejando pases de buena factura, poco a poco el toro fue pidiendo acortar la distancia, pero siempre con buena embestida a pesar de su poca fuerza
Jerónimo dio pausas al toro esperando su recuperación, al son del pasodoble, el tlaxcalteca dejó ver tandas de derechazos que fueron acabando con la fuerza del primero de la tarde.
Por naturales un toro que no tuvo recorrido. Una estocada en buena colocación que arrancó las palmas de los asistentes y que hizo cortar una oreja al matador Jerónimo de Aguilar y mereció los aplausos del respetable.
El segundo de la tarde, “Campanero” de la ganadería de Rancho Seco con 400kg, fue para Gerardo Rivera, quien por un fuerte golpe sufrió una fractura en la cornamenta y limitó la lidia, ya que José Luis Andriano, juez de plaza, en vez de regresar al astado a los corrales, decidió que siguiera el toro, entre pitidos y reproches del público.
Rivera con este pesar siguió con la lidia ante un público inentendible.
El de Apizaco se vio en dificultades para pasaportar al segundo de la tarde dejando tres cuartos del acero.
Reyes Huerta presentó a “SACRISTÁN” con 380kg para José Luis Angelino, un toro que a pesar de ser chico tuvo embestida, respetado en varas, un quite por chiquelinas adornó la faena.
Con las banderillas, invitando al “Pausao”, se vio par muy vistoso. En el tercer tercio, JL Angelino brindó al público y a sus alternantes acompañado del pasodoble y un poco de viento.
Jose Luis, templado, entendió al burel que tenía recorrido y embestida. lo que detonó el olé en los tendidos, un animal que permitió al torero Tlaxcalteca lucir y forjar una buena lidia con transmisión.
Al matar, el heredero del Pulques dejó una estocada en buena colocación que de inmediato surtió efecto en el tercero de la tarde, al que Jose Luis logró cortar una oreja y arrastre lento para el toro.
Angelino no agradeció al juez y dio la vuelta al ruedo
La Ganaderia de Haro mandó “3 ladrillo”con 430kg, para Uriel Moreno ” EL ZAPATA”, quien recibió con una tanda de faroles de rodillas al cuarto de la tarde, una puya medida por el matador, un buen quite por chiquelinas a cargo de “EL MOJITO” y un tercio de banderillas con Rafael Soriano, “El mojito” y el Zapata, al son de España Cañi dejó grandes pares de banderillas.
Brindis a los asistentes, y un inicio de faena sentado en el estribo, Uriel Moreno con pausa e idea conectó con el público por tandas de derechazos, dejando ver las cualidades del toro y sapiencia torera para resolver algunos defectos del toro.
Con calma, Uriel Moreno dejó una estocada caída que logró pasaportar al burel cortando así una oreja.
“PARAMÉDICO” de la Soledad, fue para Rogelio Sanchez, un toro que poco dio de sí para el lucimiento del matador, quien ha intentado volver a los ruedos de la mejor manera, una puya que solo fue marcada por el varilarguero y una serie de banderillas en las que el toro con dificultades dejó llegar al torero.
Tras varios intentos en la muleta, Sanchez decidió tirarse a matar, dejando tras varios pinchazos 3/4 de acero que pasaportan al burel en medio de un silencio rotundo.
“Brigadista” fue para Angelino de Arriaga. Un toro que no dejó lucir para nada al matador, se rajó desde el momento de la puya y no dio oportunidad de que Arriaga mostrara su arte. en medio de un rotundo silencio pasaportó al cierraplaza.