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OAXACA, Oax. 1 de octubre de 2017.- La deuda pública que mantiene el gobierno de Oaxaca podría alcanzar los 20 mil millones de pesos si se considera la que heredó de la administración anterior, la adquirida para solventar adeudos y la recién solicitada para la reconstrucción en el Istmo de Tehuantepec.
Oaxaca inició la actual administración con una de sus mayores crisis económicas en la historia reciente. Durante el gobierno de Gabino Cué la deuda pública incrementó en un estimado de 140% con respecto de la que dejó su antecesor Ulises Ruiz Ortiz.
Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) compilados por la asociación México ¿Cómo vamos? para el #semáforoeconómico, muestra el crecimiento de la deuda a partir de 2012, fecha que coincide con varios casos de corrupción que se investigan por el manejo irregular de recursos públicos.
En 2012, la deuda pública representaba el 2.3% del PIB estatal y pasó a 4.2% en 2013, es decir, en un año se duplicó. En 2014, la deuda pública representó el 4.1% del PIB, es decir, bajó apenas .1%, pero en 2015 se disparó, pues pasó a 4.8%. En 2016, bajó a 4% y comenzando el 2017, a 3.8%. Sin embargo, nuevamente mostrará un repunte por los créditos solicitados para solventar algunos requerimientos inmediatos.
En 2015, cuando la deuda mostró un crecimiento mayor, en números significó un recurso estimado en 12 mil 400 millones de pesos. Para 2016, el monto era de 14 mil 400 millones de pesos aproximadamente. Al inicio de la presente administración se solicitó un crédito por 2 mil 200 millones de pesos, lo que incrementó la cifra aunado a los 2 mil 500 millones de déficit de gasto corriente del Estado.
En marzo de 2017, el secretario de Finanzas del gobierno de Oaxaca, Jorge Gallardo Casas estimó que la deuda acumulada del gobierno crecería a unos 18 mil millones de pesos. Con lo aprobado por el Congreso de Oaxaca este viernes 29 de septiembre, el monto incrementará y sumado a los intereses, podría llegar a los 20 mil millones de pesos, lo que frenará la inversión en otros rubros y desacelerará el crecimiento económico que en el primer trimestre de 2017 se ubicó en 2.4%.
El gobierno de Gabino Cué está siendo investigado por diversas irregularidades en el manejo de los recursos públicos, ya que además durante su administración no solo se dejó de aplicar el presupuesto etiquetado, sino se incrementó la deuda sin un destino específico. De manera somera solo se dijo que los préstamos solicitados habrían sido para el pago de la nómina magisterial, aunque en ello tampoco hay claridad.
La contratación de la nueva deuda por mil 200 millones de pesos será para la reconstrucción de viviendas e infraestructura urbana que resultó afectada por los sismos ante la falta de presupuesto estatal para solventar la situación