A reconstruir el país: Obispos

CIUDAD DE MÉXICO, 1 de julio de 2018.- La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo un llamado a serenar los ánimos ante el proceso electoral, y a comprometerse a participar activamente para que las promesas de de campaña de quien resulte ganador en los cargos de elección popular cumplan sus promesas.

En un documento publicado este domingo, los Obispos publicaron una editorial llamada Serenar los ánimos para reconstruir, en donde reitera un exhorto a acudir a las casillas.

“Entrada la noche de este 1 de julio, los mexicanos sabremos quién será el próximo Presidente de nuestro país.

Ha concluido un largo proceso electoral en el que no faltaron las confrontaciones, pero es momento de serenar los ánimos y dejar que las instituciones correspondientes anuncien oficialmente quién ha sido favorecido por el voto popular y arbitrar los conflictos que de la jornada electoral emanen”, refiere el documento.

“Durante el proceso electoral, la Iglesia católica se sumó a las diferentes voces civiles y de gobierno para motivar a todas las personas a salir este domingo a hacer uso de su derecho a elegir de manera crítica y responsable a sus autoridades; sin lugar a dudas, esta jornada se convertirá en una gran fiesta de la democracia”, agregó.

La CEM precisa que el compromiso va más allá pues la vida democrática de un pueblo no termina emitiendo el voto sino que persiste cada día para la reconstrucción del país.

“Una auténtica cultura de la democracia es participativa y solidaria, representativa y subsidiaria, promotora de la dignidad y de los derechos humanos… este domingo concluye un capítulo importante de la vida nacional tras celebrarse los comicios más grandes de nuestra historia, pero inicia otro más importante: el de asumir como mexicanos la responsabilidad cívica de participar activamente para que las promesas de campaña se cumplan –aportando desde nuestra fe lo que corresponde–, pero también coadyuvando en la reconstrucción del tejido social. Ahora, a reconstruir el país”, concluye el escrito.