Altar de muertos, tradición que se niega a perecer

MORELIA, Mich., 31 de octubre de 2018.- Por ser una forma de mantener vivo el recuerdo de los seres queridos que ya no están con nosotros, la costumbre de colocar el altar de muertos en los hogares mexicanos es una tradición que aún perdura y que se niega a morir.

La creencia es que una vez al año los difuntos regresan al mundo de los vivos y para recibirlos, se les coloca una ofrenda conformada por varios elementos como la flor de cempasúchil, veladoras, comida, pan, agua, incienso, una fotografía y su objetos preferidos.

En Quadratín consultamos a los ciudadanos para conocer por qué es importante mantener viva esta tradición y cómo es que se va a heredando a las nuevas generaciones.

“Me gusta mucho esta tradición porque es una forma de recordar a mis familiares. Desde siempre lo pongo, ahorita ya lo tengo. Pongo fotografías, flores, veladoras, agua y mucha fruta. Año con año lo pongo”, dijo María Guadalupe Tinoco Corona.

“En mi casa ponemos flores, comida, fotos de nuestros muertos. Es una tradición muy arraigada, sobre todo de Michoacán, y aunque también lo hacen en otros estados aquí es una tradición muy fuerte”, comentó Juan Pablo Murillo.

Para la señora Raquel Campos, aunque puede resultar dolorosa esta fecha en la que recordamos de manera especial a nuestros muertos, es también un momento único en el que podemos tener una conexión especial con ellos y que considera, debe mantenerse entre las nuevas generaciones.

“Es la tradición para recordar a los que ya se fueron. Colocamos las fotografías de nuestros muertos y lo adornamos con la flor de cempasúchil, la comida que les gustaba comer, les ponemos tequila, cerveza, dulces, todo lo que les gustaba”, compartió.

“Es lo que hay que inculcar a las nuevas generaciones para mantener en la memoria a nuestras personas queridas. Últimamente ha cobrado mucha fuerza. En mi casa les ponemos flores, la comida favorita de nuestros muertos y una fotografía de a quienes les dedicamos el altar”, comentó Vianney Olmedo.

“Se ha convertido en una forma de vida, es parte de nuestra formación y cultura. Lamentablemente se combina con otra, que es el Halloween, pero también percibo que hay un fortalecimiento. Debemos de mantener vivas este tipo de tradiciones que nos fueron heredadas”, mencionó Adrián Reyes.