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QUERÉTARO, Qro., 12 de mayo de 2024.- El sitio arqueológico de El Cerrito, ubicado en la cabecera del municipio de Corregidora, a tan solo siete kilómetros del centro de la ciudad de Querétaro, es un tesoro histórico que ofrece una ventana al pasado prehispánico de la región.
Este lugar sagrado está conformado por varias estructuras significativas, entre las que se destacan el Basamento Piramidal, la Plaza de las Esculturas, la Plaza de la Danza, el Altar de las Obsidianas y el Altar de los Cráneos, además del imponente Palacio de los Cuatro Altares.
Estos vestigios revelan la importancia de El Cerrito como centro ceremonial y político, utilizado por diversas culturas como los Toltecas, Chichimecas, Purépechas y Otomíes.
Una de las modificaciones más notables en la cima de la Pirámide es la construcción de una casa de arquitectura ecléctica conocida como el Fortín, erigida en 1887.
Acceder a la Zona Arqueológica El Cerrito es sencillo.
Desde la carretera libre a Celaya, en el kilómetro seis, se debe tomar un desvío al poniente y continuar por la calle Don Bosco o de la Pirámide hasta llegar al lugar.
El entorno de El Cerrito es igualmente fascinante.
Los suelos que rodean al sitio prehispánico son ricos en materia orgánica y fertilidad, lo que junto con el clima y la disponibilidad de agua, propició una agricultura intensiva que sustentó a una gran población en tiempos antiguos.
La flora que perdura hasta hoy en día en la zona incluye especies como el mezquite, huizache, palo xixiote, nopal, órgano, garambullo, granjeno, tullidora, sangregado, sávila y diversos pastos.