Convocan a talentos locales a participar en la Aldea Mágica de Huamantla
Como cada año, los festejados utilizaron sus mejores prendas y se reunieron para celebrar en familia una de las fechas más importantes en su desarrollo profesional.
La interpretación de varias canciones fue el aliciente principal para dar continuidad al festejo y se recordara a la música como uno de los aspectos más importantes de la vida social y cultural.
Con gran júbilo músicos tlaxcaltecas interpretaron canciones a Santa Cecilia, personaje legendario, mártir del cristianismo, quien se cree vinculada a este arte derivado que en sus imágenes se mostraba con un arpa y otros instrumentos.
Desde temprana hora, artistas del estado cantaron las mañanitas a su patrona y dieron un recorrido por algunas calles de la capital.
En un ambiente de alegría, los músicos entonaron diferentes piezas musicales, en su mayoría acompañadas con mariachi.
Los festejados se reunieron con sus familiares en templos religiosos para orar y pedir por la profesión noble que desempeñan.
Posteriormente, algunos se congregaron en domicilios particulares para compartir los alimentos que prepararon para celebrar una de las fechas más importantes para ellos.
Rodeados de un gran ambiente, con familiares, cantos y platillos, los intérpretes recordaron que son una parte fundamental de la sociedad al entonar canciones que invaden los sentimientos y recuerdos de la población de todas las edades.
Esta festividad se lleva a cabo de manera internacional el 22 de noviembre para los músicos e intérpretes, pues es la fecha que conmemora de la muerte de Santa Cecilia, patrona de estos.
Algunas fuentes, mencionan que se debe a pintores del siglo XV que Santa Cecilia sea vinculada con la música, ya que en sus cuadros era pintada tocando el arpa y otros instrumentos musicales.
Sobre Santa Cecilia no se tienen muchos datos. Se sabe que nació en el año 177, posiblemente en Roma, dentro de una familia cristiana y consagró su virginidad a Dios.
Pese a negarse a contraer nupcias, fue obligada, pero pidió a su esposo conservar la virginidad y Valerio el esposo la aceptó.
Por defender a los mártires de la iglesia fue condenada a morir en el fuego de las aguas termales de su casa; originalmente iba a ser degollada.
Mientras esperaba su muerte cantó salmos de misas. Duró tres días en agonía; hasta que falleció. En 1594 fue nombrada patrona de los músicos. Su esposo Valerio y Tiburcio, hermano de éste, fueron decapitados al dar sepultura cristiana a los mártires.
Mientras que en lo que respecta al día del músico, la celebración, inició el 22 de noviembre de 1570 con un festejo realizado en la localidad francesa de Evreux, Normandía, con un torneo de compositores, a partir de 1695 se comenzó a celebrar en Edimburgo, Escocia, con cierta regularidad el Día de la Música.
Posteriormente, otros países como Alemania, España y Francia siguieron el festejo, mientras que en Latinoamérica esta tradición de realizar una fiesta empezó en Río de Janeiro, Brasil entre 1919 y 1920, misma que se extendió al resto del continente.
Cada año, se rinde especial homenaje a aquellas personas que han dedicado su vida a la creación y la ejecución musical, para regalarle al público mediante los diversos géneros existentes, melodías y ritmos para el espíritu, lo que ofrece paz y tranquilidad a la existencia.