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Ha sido difundido con profusión (los chismes corren imparables) y sabido por todos que a pesar de quererse mucho, los emperadores de México, Maximiliano y Carlota, no tenían relaciones íntimas entre ellos. Incluso se sabe que al llegar a la Ciudad de México Carlota hubo de dormir en un sillón mientras que Max lo hizo ¡en una mesa de billar!. La culpa fue echada a las chinches que pululaban por todos los salones del palacio, el cual estaba abandonado desde hacía meses.
Esa falta de un intercambio de información genética (por decirlo de una manera elegante) preocupaba sobre todo a Maximiliano quien al soñar en el suyo como el imperio más hermoso del mundo requería para ello de sucesión; le urgía un heredero y con tal fin adoptó al nieto del emperador Agustín de Iturbide para que criado en la corte, creciera y por méritos de su abuelo, también emperador, se hiciera cargo llegado el momento, del trono de México.
Así las cosa Max y Karla podían perseverar en su abstinencia sexual. Bueno, abstinencia entre ellos porque aunque las malas lenguas llegaron a decir que Maximiliano era impotente también llegó a trascender que ¡qué va!, que de impotente no tenía nada. Al contrario.
A Maximiliano le daba por ir con cierta frecuencia, a Cuernavaca –según decía– a herborizar y cazar mariposas; pero comenzó a ser un secreto a voces que en la Quinta Borda, recibía de noche a ciertas damas que entraban a sus habitaciones por una puertecita del jardín, semioculta por las enredaderas. Se mencionó entre ellas a una tal señora Armida, de Acapatzingo con la que, según historiadores, tuvo algunos descendientes.
También trascendió que en Cuernavaca tenía una amante, una bella joven de piel morena, hija o esposa del jardinero jefe de la Quinta Borda, de apellido Sedano. José Emilio Pacheco llamó a la pareja “el buitre y el ruiseñor”. La mujer quedó embarazada y un buen dia desapareció. Secuestrada o por propia voluntad fue llevada a la corte de Viena donde dio a luz. Su hijo, conocido como Julio Sedano y Leguizano, creció en medio de lujos y recibió la educación que se daba a un Habsburgo; como tal se le trataba pero no se le dio ningún título ni lugar en la línea de sucesión porque aunque Habsburgo era un bastardo.
Frecuentaba las cortes de Europa, “se daba aires de gran señor”, su afabilidad y cortesanía le daban un aire de pulcritud y distinción”; en plena Bella Epoqueera todo un bon vivant. Su gran parecido con Maximiliano, alto, delgado, iguales facciones sólo que con la barba negra en lugar de la rubia de su padre, lo hacían presumir ante quien fuera que era el hijo del emperador de México. Fue también diplomático mexicano, ya que durante el porfiriato ocupó el cargo de secretario de la embajada mexicana en París.
Al inicio de la Primera Guerra Mundial Sedano, sin un centavo, se involucró con un grupo de informantes al servicio de los alemanes, encabezado por la famosa espía holandesa Mata Hari. Pero era tan torpe nuestro personaje que enviaba sus informes escritos con tinta invisible no entre los renglones de una carta falsa, sino en una hoja en blanco. Descubierto por los aliados fue recluido en la cárcel de La Santé y fusilado el 10 de octubre de 1917 en Vincennes. Se tiene entendido que el oficial que comandaba el pelotón le dijo: “Sedano y Leguizano, hijo del emperador de México, vas a ser fusilado como traidor” .
Carlota, por su parte tuvo relaciones con el coronel Alfred van der Smissen, comandante de un cuerpo de élite enviado a México por su padre, el Rey Leopoldo I, de Bélgica para que fuera la Guardia de la Emperatriz. Embarazada partió a Europa cuando el imperio de su marido estaba por derrumbarse y no se sabe con precisión si el hijo nació en Miramar ó en Bruselas.
Maxime Weygand, adoptado de hecho por Leopoldo creció como un príncipe, fue adoptado por un francés de nombre Francois Joseph Weygand, influyente en la corte de Bruselas. y eso le permitió ingresar al prestigiado colegio militar de Saint Cyr. En la primera guerra fungió como jefe de estado mayor del Mariscal Foch y como tal asistió a las más importantes operaciones de guerra contra la Alemania imperial (batalla del Marne, batalla de Verdún y batalla del Somme, entre otras).en 1920 organizó el ejército polaco en su lucha contra la entonces naciente Unión Soviética y se distinguió matando comunistas en Varsovia y Berlín. Durante la II guerra tras la ocupación de Francia por los nazis, Weygand ocupó el cargo de Ministro de Defensa en el gobierno encabezado por Petain, hasta septiembre de 1940; en 1939 había asumió el cargo de jefe militar en las colonias francesas del Oriente Próximo. Falleció en Paris en 1965.
María Carlota Amelia Augusta Victoria Clementina Leopoldina de Sajonia-Coburgo-Gotha y Orleans sobrevivió sesenta años a su esposo; según Fernando del Paso “Carlota loca y viva moría sin morirse nunca”, falleció en Bruselas el 19 de enero de 1927, fue la última emperatriz de México; siendo de nacimiento Princesa de Bélgica y por su matrimonio fue también Archiduquesa de Austria, princesa de Lorena y Hungría, condesa de Habsburgo y Virreina consorte del Lombardo-Véneto.
Su imperial marido, Fernando Maximiliano José María de Habsburgo-Lorena había nacido en Viena el 6 de julio de 1832, fue el segundo emperador de México y único monarca del denominado Segundo Imperio Mexicano. Por nacimiento, ostentó la dignidad de archiduque de Austria, debido a su filiación con la poderosa Casa de Habsburgo. Fue el hermano más cercano del emperador Francisco José. Era el primero en la línea de sucesión de la corona de Austria-Hungría, pero renunció a ella cuando aceptó el trono de México.
And that is all.. .