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CIUDAD DE MÉXICO, 25 de noviembre de 2024.- En un acto que marca un precedente en la gestión hídrica del país, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo encabezó la firma del Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad. Este pacto, que reúne a gobernadores de todos los partidos, empresarios, académicos y distritos de riego, busca garantizar el acceso equitativo al agua como un derecho humano, con la visión de preservarla como un bien nacional y no como una mercancía.
Durante el evento, Sheinbaum subrayó:
¿Qué nos une? El reconocimiento del agua como un bien nacional, un recurso natural, no como una mercancía, sino como un derecho. Este acuerdo permitirá que cada mexicana y mexicano tenga acceso al agua de calidad y en cantidad suficiente, al tiempo que asegura la producción de alimentos y el desarrollo sustentable del país.
El plan incluye varios ejes estratégicos:
1. Regulación de concesiones de agua potable.
2. Inversión de 9 mil millones de pesos para tecnificar el riego agrícola en 2025.
3. Colaboración empresarial para mejorar el tratamiento de aguas residuales.
4. Ejecución de obras estratégicas junto con los estados.
5. Saneamiento de ríos prioritarios como Lerma-Santiago, Tula y Atoyac.
Uno de los momentos más destacados fue el anuncio de Eduardo Tricio, presidente de Grupo Lala, quien presentó cinco acciones concretas para contribuir al acuerdo:
1. Transferencia de concesiones de agua para consumo humano en Monterrey y Ciudad de México.
2. Implementación de tecnologías de precisión en la Comarca Lagunera para optimizar el riego.
3. Devolución de concesiones en Cuatro Ciénegas, Coahuila, una histórica demanda ambientalista.
4. Recuperación de 600 mil metros cuadrados de humedales en el área natural protegida de Cuatro Ciénegas.
5. Protección de ecosistemas prioritarios en la cuenca del río Nazas y el Cañón de Fernández.
El Acuerdo Nacional busca sentar las bases de un Plan Nacional Hídrico con visión a largo plazo, asegurando la sustentabilidad y el acceso equitativo al agua para todos los mexicanos. Este esfuerzo conjunto demuestra que el consenso político y social es clave para enfrentar los desafíos ambientales y garantizar el desarrollo sostenible del país.