Consumo de los trabajadores mexicanos esencial en EU
CIUDAD DE MÉXICO, 7 de febrero de 2018.- Daniel Martínez Macedo, académico de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, diseñó un prototipo de lentes que busca ayudar a las personas con debilidad visual a desarrollar mejor su vida cotidiana y favorecer su inclusión social y laboral.
En México, añadió UNAM en un comunicado, del total de población con problemas visuales, más del 36 por ciento está discapacitado en algún grado, y alrededor del 63 por ciento no utiliza ninguna herramienta ad hoc. Martínez Macedo desarrolló los InteLentes, una innovación con cámara integrada, sincronizada con un teléfono celular sencillo para captar señales de WiFi o Bluetooth, y a partir de las fotografías identificar desde objetos cotidianos y animales, hasta personas o lugares. Cuentan con botones para acceder o validar la señal de Internet o bluetooth, para encender o apagar y para cambiar de modo; además, están configurados para ser reiniciados, en caso de que el usuario lo requiera.
Los InteLentes funcionan en tiempo real, es decir, una vez que se toma la fotografía no tarda más de cinco segundos en haber una respuesta de los lentes, destacó.
Con ayuda de la tecnología, pretendemos mejorar la calidad de vida de los débiles visuales, reiteró. Con esta innovación se pueden cubrir cinco escenarios: el primero, es la detección de animales, entornos y personas; es decir, los lentes son capaces de discernir entre un perro, un gato, una maceta, un florero o una computadora, y hacer un cálculo estimado de la edad y sexo de un individuo.
El segundo modo consiste en la lectura, procesamiento y traducción de textos impresos, lo que ayudaría a los usuarios a desenvolverse en lugares en donde no se cuenta con sistema Braille, como los restaurantes.
El tercero, se refiere a la lectura, procesamiento y traducción al español de textos escritos a mano, funcional para estudiantes, pues los lentes leen por ellos, por ejemplo, lo que alguien más anota en un pizarrón o en una libreta.
El cuarto escenario es la identificación de rostros conocidos, los cuales se dan de alta dentro de los lentes. “Así, alguien con debilidad visual puede registrar las caras de las personas con quienes convive”, especificó.
El quinto modo es la detección e identificación de lugares, “aunque en este momento sólo podría aplicarse en sitios muy conocidos y no tan específicos”, reconoció Martínez Macedo.
El universitario subrayó que se trata de un primer prototipo, pero se proyecta optimizar nuevas versiones para tener la capacidad de identificar el lugar exacto en donde el usuario se encuentra con sólo preguntar a los lentes.
El ingeniero en computación destacó que busca apoyo económico para mejorar el software y el prototipo. Además, indicó que ya existen lentes inteligentes en el mercado, pero no cuentan con las mismas funciones que InteLentes y su precio oscila entre los mil 500 y dos mil dólares.
“Nuestro objetivo es fabricarlos a un precio aproximado de dos mil pesos, y de conseguir el apoyo necesario, en un plazo de un año estarían listos”, concluyó.