La Armada de México es un baluarte de libertad: Claudia Sheinbaum
Morelia, Mich., 28 de febrero, 2017.- Qué buen corazón tiene Felipe Calderón. Ahora resulta que ha decidido donar los 200 mil pesos mensuales que recibe de su pensión como expresidente en beneficio de niños con cáncer. Que su esposa Margarita Zavala esté tratando de convertirse en candidata presidencial seguramente no tiene nada que ver con tan generoso gesto.
Y es que esa frase que dice la Biblia de que “Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha”, no la aplica el michoacano, pues si se tratara de un acto de bondad genuino, no lo habría publicitado tanto, en plena competencia para que su esposa sea candidata.
El exmandatario publicó una carta en la que anuncia humildemente que ha decidido donar su pensión de expresidente a la asociación “Aquí nadie se rinde”, que trabaja en favor de niños con cáncer.
De paso, curándose en salud por aquellos que vean con sospechosismo esta acción, imaginándose el dinero que legalmente o no pudo haber obtenido durante su encargo, dijo que ha venido recibiendo hasta ahora ese recurso porque “nunca robé, ni tenía otro ingreso distinto al de servidor público y la necesitaba”.
Pero ahora, dijo que ha conseguido otras chambitas que le han dado solvencia económica y espera que de esa forma pueda seguir manteniendo a su familia. Hasta quiero llorar.
Sí, pero de indignación. ¿De verdad pensará que alguien va a creer que es un acto de bondad desinteresado y que no es un gesto movido por el más aberrante oportunismo político tan grotesco que hasta es capaz de aprovecharse de una situación tan sensible como son los niños con cáncer?
Y luego critican la demagogia y el populismo.