Presta Infonavit hasta 2.8 mdp para comprar un terreno
CHETUMAL, QRoo, 29 de agosto de 2018.- La ex diputada federal panista, ex alcaldesa de Isla Mujeres y ahora titular de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo), Alicia Ricalde Magaña, gasta anualmente casi 100 mil pesos por tomar su gustado café.
Según información oficial del Portal de Transparencia, la funcionaría de 53 años de edad compra garrafones de agua de 800 pesos y cada kilogramo de café le cuesta aproximarmente 500 pesos, sin contar con el gasto del azúcar, crema y galletitas, todo a cargo del erario público.
Ricalde Magaña ha gastado en dos años sólo en servicio de coffe break 188 mil 859 pesos, es decir 94 mil 429 pesos con 50 centavos en la nueva administración estatal.
A la panista se le olvidó que en 2016 cuando era diputada federal, se unió a su bancada para denunciar penalmente ante la Procuraduría General de la República el delito de desvío de recursos del entonces gobernador de Quintana Roo, luego de que Transparencia y Acceso a la Información dio a conocer que en 2014, Roberto Borge y su gabinete erogó 203 millones de pesos para la renta de aviones a la empresa Servicios Aéreos Ejecutivos.
Incluso sacó cuentas y afirmó que por servicio de aeronaves el gobierno de Borge destinaba al día la cantidad de 676 mil 439 más de 20 millones de pesos al mes por concepto de transporte privado.
En ese entonces lamentaba que el gobierno de Quintana Roo presentara uno de los mayores crecimientos de pobreza, que se tuviera la tasa más alta de niños trabajando en la informalidad y que la entidad fuera de las que más portaran gastos onerosos.
Incluso, la isleña lamentó en ese entonces que el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social ubicara al gobierno anterior en el grupo de estados en los que entre el 2010 y 2014 se presentaba un incremento en la incidencia de la pobreza.
Pero desde su nueva trinchera, en la administración del gobierno de Carlos Joaquín González, se le olvidó lo que tanto defendía y por eso se da ahora los lujos de tomar café muy caro, que paga a costillas de todos los quintanarroenses.