Detienen a 7 personas y aseguran 600 kg de droga en cateos en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO, 2 de febrero de 2018.- A pesar de que no se ha realizado una expulsión masiva de connacionales que viven en Estados Unidos, se desconoce si el presidente Donald Trump cumplirá con su advertencia de devolver a migrantes a su país, indicó dijo Mónica González Contró, abogada General de la UNAM.
Ha sido un año de incertidumbre, sin una política clara, que coloca a los migrantes en una situación de extrema vulnerabilidad; no tener una ciudadanía y la nacionalidad los pone en riesgo permanente. “No sabemos si las amenazas se cumplirán y de qué forman se hará”, pronunció. Al intervenir en el seminario Análisis de la Política Migratoria en los Estados Unidos de América.
Un año de incertidumbre, recordó que desde la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, la UNAM ha emprendido diversas acciones para mitigar el impacto que llegue a tener con nuestros connacionales, especialmente en el ámbito de los derechos humanos.
La también integrante del Instituto de Investigaciones Jurídicas señaló que la misión de la Universidad es la investigación, la docencia y la difusión de la cultura, y es precisamente en esos ámbitos que la UNAM ha decidido colaborar en solidaridad con los mexicanos en aquel país.
En el auditorio Jorge Carpizo de la Coordinación de Humanidades, manifestó que la Universidad de la nación está comprometida con dicha misión, por ello se dio a la tarea de reflexionar sobre la política migratoria de Trump a un año de su llegada.
La herramienta definitiva para combatir esta situación, subrayó, son los derechos humanos. “La condición de vulnerabilidad, este concepto que ha venido a sustituir al de grupos vulnerables, que durante muchas décadas estuvo vigente, no es gratuito, no es simplemente una cuestión de terminología; lo que hace que una persona sea más o menos vulnerable no es la condición, sino el entorno”.
Ante Alberto Vital, coordinador de Humanidades, Luis Raúl González Pérez, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, advirtió que la posibilidad de que la dignidad humana se niegue y trasgreda no debe verse como una cuestión del pasado, sino como riesgo presente y real.
Los cambios en la política migratoria, económica y social de EU, al estar acompañados de expresiones de discriminación, misoginia, exclusión, racismo y xenofobia, nos pusieron en un estado de alerta permanente.
“¿Qué gloria puede existir en detener a mujeres, niñas, y niños, adolescentes o ancianos desarmados, con recursos económicos muy limitados, que no hablan inglés y que, en razón de ello, difícilmente podrán hacer valer sus derechos?”, cuestionó González Pérez.