Monreal, la derrota anunciada

CDMX, 22 de agosto, 2017.- Resulta lamentable que las propuestas de gobierno que pudieran ofrecer los precandidatos de Morena por la Ciudad de México, sean secundarias, es decir, poco importa el contenido programático de la oferta política de Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum, Martí Batres y Mario Delgado, cuando se sabe de antemano que la contienda interna perdió su sentido democrático.

Se realizó una encuesta este fin de semana, cuando ya varias habían declarado ganador a Monreal, sin embargo, Andrés Manuel López Obrador, insistió en repetir el proceso y quebró la equidad cuando dejó en evidencia que la jefa delegacional de Tlalpan era su favorita para dirigir la capital.

En este sentido, Monreal se ha convertido en el candidato incómodo y ha tratado de manera infructuosa de revertir la decisión del partido, al proponer dos encuestas adicionales, no obstante, es de esperarse que tendrá que aceptar cualquier premio de consolación, pues perdió el respaldo que buscó entre los perredistas y del propio Miguel Ángel Mancera.

La encuesta es una aberración, no sólo se desconoce la metodología, el diseño de los cuestionarios y los resultados de la consulta aplicada por las Comisiones de Elecciones y Formación de Morena en 800 hogares y 200 cuestionarios en las calles de la capital durante los días 18, 19 y 20 de agosto, sino que el fallo al parecer será inapelable.

La validez de la aplicación de la encuesta se basa en un discurso muy débil que busca naturalizar una práctica que se realiza desde hace aproximadamente tres años en otros procesos.

No cabe duda, que los partidos políticos, en general, no han aprendido que un proyecto democrático se construye desde las contiendas internas, por lo que de no corregir sus mecanismos viciados, Morena producirá candidatos con niveles de legitimidad muy bajos.