Respaldan diputadas liderazgo de Esteban Bautista en Congreso de Veracruz
CIUDAD DE MEXICO. 8 de marzo de 2022.- La CSI se solidariza con las trabajadoras que celebran el Día Internacional de la Mujer, este 8 de Marzo, cuando han pasado dos años desde que la COVID-19 fue declarada pandemia mundial, trayendo consigo consecuencias devastadoras para la vida y el sustento de las personas.
Por ello la dirigente de la Central Sindical Internacional (CSI) Sharan Burrow señaló que “estamos asistiendo a una pérdida sin precedentes de puestos de trabajo e ingresos, aproximadamente cuatro veces mayor que la derivada de la crisis financiera mundial de 2009”.
Aunque se trata de una crisis que nos afecta a todos, no todos nos vemos afectados de la misma manera.
Las mujeres jóvenes, afroamericanas, las trabajadoras migrantes, las indígenas y las que trabajan en el sector de la economía informal, en particular las trabajadoras del hogar y las mujeres con discapacidad, que ya eran sumamente vulnerables, se han visto especialmente afectadas. Los últimos datos indican que en 2021 el número de mujeres que trabajaban se redujo en 13 millones con respecto a 2019.
Esto recalca claramente la urgente necesidad de aplicar de inmediato políticas y medidas con perspectiva de género.
El nuevo contrato social de la CSI reclama la creación de 575 millones de puestos de trabajo de aquí a 2030 y la formalización del empleo de al menos 1.000 millones de trabajadoras y trabajadores del sector de la economía informal.
La inversión en la economía de cuidados es un aspecto clave de estas demandas.
Como ha señalado el secretario general de las Naciones Unidas, si se duplican las inversiones en educación, sanidad y trabajo social, podrían crearse de aquí a 2030 unos 269 millones de puestos de trabajo.
Invertir en cuidados –sanidad, educación, cuidado infantil, servicios geriátricos y otros servicios sociales– permitiría crear millones de empleos decentes para las mujeres y favorecería la participación efectiva de las mujeres en el conjunto de la economía, desarrollando unas sociedades más justas, inclusivas y dignas.
Dos tercios de la mano de obra mundial en el sector de los cuidados son mujeres. Muchas de ellas siguen atrapadas en trabajos mal pagados, precarios e informales. Exigimos un trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores del sector de los cuidados, con condiciones de trabajo seguras, salarios adecuados y protección social.
El movimiento sindical internacional seguirá luchando para que la inversión en cuidados sea una realidad en todas partes y permita conseguir más empleos decentes para las mujeres.