Detienen a 7 personas y aseguran 600 kg de droga en cateos en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de diciembre 2017.- La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) reconoció en voz de su secretario general, Jaime Valls Esponda, que la crisis económica de al menos 7 universidades públicas estatales se origina en la enorme carga que representa el pago de prestaciones en los contratos colectivos de trabajo, así como en la contratación de profesores sin el sustento financiero necesario.
La declaración de Valls al periódico El Universal se genera en medio de un conflicto recurrente al final de cada ejercicio anual en el que las instituciones educativas solicitan ampliaciones de recursos federales y estatales para cumplir con sus obligaciones laborales.
Este año, la crisis ha sido más grave aún ante la falta de recursos en los gobiernos estatales y por la emergencia que representa la reconstrucción obligada por los sismos del 7 h el 19 de septiembre.
La grave situación a la que se enfrentan las universidades pone en la mesa de negociación prestaciones excesivas y sistemas pensionarios que ahogan a las propias universidades.
Un contraste a la desinformación, propiciada por las dirigencias sindicales, que prevalece entre la base trabajadora de la Universidad Michoacana (UMSNH) son las acciones anunciadas este fin de semana por la Universidad de Guanajuato y la Autónoma de Baja California, que adoptaron medidas pensionarias necesarias y hoy aseguran una permanencia de 100 años.
Los rescates financieros anuales no son ni deben determinar la continuidad de las nobles labores académicas para las que las universidades fueron creadas.
Es tiempo de vacas flacas, pero también de construir nuevas autonomías, de hacer de las universidades instituciones sólidas y capaces de seguir a la vanguardia de la educación.
Los acuerdos deberán construirse en momentos de crisis, no es posible seguir gastando igual que hace 25 años. Las modificaciones pensionarias son, como dice Jaime Valls, un tema de corresponsabilidad institucional, corresponsabilidad que en muchos casos han evadido las autoridades universitarias y los gobiernos estatales.