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COLIMA, Col., 17 de septiembre de 2017.- En la última semana se observó un descenso en la actividad sísmica del Volcán de Fuego, así como en los valores de flujo de SO2, sin embargo, en años recientes esta disminución de actividad ya ha sido observada y puede alternarse con períodos de mayor actividad.
Lo anterior fue informado por la Red Sísmica de Colima RESCO- CUIV, de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Colima, respecto al monitoreo semanal que realiza de la actividad del volcán de Colima.
De acuerdo al reporte emitido, en la última semana se contabilizaron de forma automática 17 eventos de alta frecuencia (HFs), 28 eventos de largo periodo (LPs), 1 hora de tremor y 8 derrumbes y 3 explosiones.
En el periodo reportado, señala el informe que debido a las condiciones meteorológicas que prevalecieron, sólo ocasionalmente se pudo observar al volcán y no fue posible detectar algún fenómeno asociado a la actividad volcánica (incandescencia, explosiones con ceniza, flujos piroclásticos y/o derrumbes).
Por lo que respecta a los estudios de la geoquímica, los días 12 y 13 de septiembre se realizaron mediciones del flujo de SO2, los valores estuvieron por debajo del nivel de detección (~0.1 kg/s).
Asimismo, no se han observado anomalías térmicas detectadas por el sistema satelital MIROVA en la última semana.
Ante esos resultados es que la RESCO-CUEIV-Facultad de Ciencias Universidad de Colima concluye señalando que durante la última semana se observó un descenso en la actividad sísmica y los valores de flujo de SO2.
“Sin embargo, en años recientes esta disminución de actividad ya ha sido observada y puede alternarse con periodos de mayor actividad, por lo que no se descarta totalmente el inicio de un nuevo periodo de efusión de lava en las siguientes semanas”.
Añade que ante eso es importante mantenerse atento a la evolución de este proceso, pues tampoco se descarta la ocurrencia de posibles explosiones en los siguientes días a semanas.