Sugiere gobierno que periodista tuvo la culpa de que lo mataran

ACAPULCO, Gro., 6 de marzo de 2017.- El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobierno, Roberto Campa Cifrián, aseguró que, a través del mecanismo de protección a periodistas, tres veces se intentó sacar de Guerrero al reportero Cecilio Pineda Birto, asesinado el pasado jueves 2 de marzo, y las tres veces se negó.

Entrevistado esta mañana por Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula, Campa Cifrián explicó que el 19 de septiembre de 2015 se recibió la primera alerta, cuando Pineda Birto fue amenazado directamente por un grupo delictivo que opera en la zona de la Tierra Caliente, y el 23 de ese mes, el mecanismo determinó que era indispensable que el periodista dejara Ciudad Altamirano, cabecera del municipio de Pungarabato, donde residía.

Indicó que se acordó con Cecilio Pineda que, con apoyo de la Policía Federal, sería trasladado a Ciudad de México (CDMX), donde ya se le había conseguido una casa con características especiales que se adecuaban a la discapacidad de su hija.

Sin embargo, el día del traslado, el reportero avisó que estaba enfermo de chikungunya y que no le sería posible salir de Ciudad Altamirano.

El 29 de enero del 2016, afirmó el subsecretario, la Junta de Gobierno volvió a reunirse y tras acordar un refugio para toda la familia, alimentos y apoyos de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, el 3 de marzo, Pineda Birto informó que aceptaba reubicarse a CDMX y que arribaría el 17 de ese mismo mes. Sin embargo no llegó.

Refirió que en abril, mayo y junio hubo complicaciones, pero que en octubre del año pasado, la Junta de Gobierno volvió a comunicarse con Cecilio Pineda “y vuelve a insistir en que hay una situación de riesgo y que en esas condiciones se garantiza su seguridad fuera de Ciudad Altamirano. El periodista nos dice que no está en Guerrero, que está en Michoacán, que considera que no hay una situación en ese momento de riesgo y acuerda con el mecanismo que se cierren las medidas en ese momento y referente a cualquier situación que se presente pues volverá a haber comunicación”, dijo Campa Cifrián.

“Me parece que se hizo todo el esfuerzo posible, se consiguió una casa aquí en Ciudad de México en condiciones especiales porque el periodista tiene una hija que tiene un problema de discapacidad y sin embargo, no fue posible nunca convencerlo de que había una situación de esas características y que aceptara las medidas que aprobó el mecanismo”, indicó.

Por último, el funcionario aseveró que todas las conversaciones con el periodista están respaldadas por actas y grabaciones telefónicas.