Poder y dinero/Víctor Sánchez Baños
TLAXCALA, Tlax., 12 de mayo de 2020.- Ante esta cuarentena encontramos en lejanos de amistades, trabajo, familia, en este caso en específico, de la pareja, tanto en casos en las que se tienen relaciones de noviazgo como en los matrimonios.
Hablaremos primero de los noviazgos, muchas relaciones en este momento al no poder interactuar directamente pasan por un estado de estancamiento por la imposibilidad de verse o incluso salir algún lugar para convivir en pareja, lo cual genera discusiones y peleas, aumentando aún más el distanciamiento emocional entre ambos.
En vez de verlo como un problema tendría que tomarse como una oportunidad en el que la relación se puede fortalecer pasando por estos tiempos difíciles, a pesar de que no se pueden realizar actividades con la pareja, se puede crear una mejor comunicación entre ambos incluso la oportunidad de conocerse aún mejor.
Esto terminaría con resultados en una relación más madura, al haber sido capaces de afrontar esta situación y sobrellevarla con éxito.
Ahora hablaremos de las relaciones de matrimonio, en este caso hay grandes diferencias, en comparación con una relación de noviazgo, ya que estas personas han vivido por mucho tiempo juntos, además de tener incluso familia, así que las problemáticas son mayores, en algunos casos ambos trabajan y puesto que, muchos se encuentran actualmente en casa debido al cierre de negocios no esenciales o haciendo home office, realizan actividades distintas a las habituales, cuidar a los hijos, actividades del hogar, etc.
Aquí llega el punto en el que la relación de pareja cambia, ya que normalmente están acostumbrados a verse al finalizar la jornada laboral, durante la cena o al finalizar el día, así que con el repentino cambio, conviven más tiempo con su pareja, ante lo cual muchos se encuentran con la situación de no saber como interactuar como pareja, ya que sus roles usualmente son de padres de familia y sus objetivos principales son los hijos, así que ahora la convivencia más cercana con su pareja suele ser complicada.
En algunos casos se llega a un enfrentamiento entre ambos, ya que hay conflictos en la mecánica de como realizan la organización en casa, el manejo de gastos, cuidado de los hijos, entre otros.
Esto sumado al estrés generado por el confinamiento puede poner en riesgo la estabilidad en la relación, llegando a un distanciamiento emocional bastante profundo, que a largo plazo podría terminar en separación.
Para evitar esto se debe empezar un proceso de reconocimiento de la pareja, hablar de uno mismo con el otro, sus sentimientos y frustraciones, hacer a un lado momentáneamente el papel de padres y retomar el de una pareja, la comunicación temprana evitará discusiones a la larga.
Ya en este punto se pueden hacer acuerdos, por ejemplo, en vez de iniciar una discusión, primero decir de manera tranquila algo que no nos pareció de nuestra pareja y lo que podría hacer para cambiarlo, sin hacer menos la manera en que lo hace.
De igual manera pueden acordar un día o un horario en el que puedan pasar tiempo juntos realizando una actividad juntos, una película, una cena en casa, esos pequeños detalles poco a poco revivirán y fortalecerán la relación.
En casos extremos donde no se encuentre una resolución satisfactoria, lo recomendable sería contactar a un especialista y en caso de decidirlo, tomar terapia de pareja.
Las relaciones tanto de noviazgo como de matrimonio, deben procurarse y darles la atención necesaria, sobretodo durante eventos como el que nos encontramos actualmente.