No alcanza
Las expectativas del PIB de 2020 de analistas consultados por el Banco de México siguen a la baja:
—1% pronosticado en enero antes de la crisis del coronavirus, contra el 2% oficial.
–Y -8.1% en la encuesta de mayo, sin registrar aún la totalidad del frenón económico que durará buena parte de junio.
La peor fase del frenón productivo se dio en el segundo trimestre; por ello, las expectativas de todo el año podrían situarse de -8% a -10%, tomando en cuenta que el PIB del segundo trimestre podría ser de -20% y la reactivación en el segundo semestre no tendrá el dinamismo requerido para levar la tasa anual arriba de -8% promedio.
La crisis productiva que reflejará el PIB es producto de tres circunstancias:
–El frenón decretado para romper las cadenas de contagio con el cierre casi total de actividades productivas.
–La falta de un plan de protección de la planta productiva y el empleo durante el tiempo de la inactividad productiva.
–La falta de un acuerdo nacional productivo para apoyar a empresas y trabajadores a regresar a la actividad económica.
La economía, en sus cifras, es una ciencia científica; las expectativas pueden llevar a los terrenos de la hechicería. Y son las cifras las que usan los analistas para prever escenarios de corto plazo.
El principal problema del frenón económico fue la falta de apoyo gubernamental a la planta productiva y el empleo. Pocas empresas, en realidad, y sólo las más grandes, pudieron mantener salarios de sus trabajadores en inactividad. Sin embargo, alrededor de 85% de la planta productiva, las micro, pequeñas y medianas empresas, quedaron al garete, sin apoyo, sin mecanismos de protección.
En este sentido, la capacidad de reactivación de la planta productiva será muy baja si no existe un acuerdo gobierno-empresarios-trabajadores para reanudar la producción. Y no se tiene un diagnóstico de las empresas sacadas de las líneas de producción, de núcleos productivos pequeños que dependían de manera directa de la demanda. A ello se agrega el grave problema de la demanda: sin apoyo gubernamental, la sociedad de consumo perdió capacidad de compra, carece de ingresos formales o informales y tardará quizá un año en reconstruir su fuerza multiplicadora de demanda efectiva.
Los países europeos que están saliendo del confinamiento tendrán una rápida incorporación productiva porque dieron apoyos a la planta productiva y el empleo, con cargo, eso sí, a déficit presupuestal y deuda. Sin embargo, todos los organismos financieros internacionales apoyaron esas decisiones porque evitaron un colapso productivo extenso después de la pandemia.
La política económica estabilizadora del gobierno mexicano negó afectar déficit y deuda, pero a costa de no apoyar a las unidades productivas individuales y colectivas. Por tanto, la pandemia desde junio ha mantenido bajo control las variables financieras, pero con abandono de la planta productiva y el empleo.
Sin ese apoyo antes de la pandemia, durante ella y en las primeras semanas posteriores, la capacidad productiva de la economía mexicana será demasiado baja como para constituir una dinámica productiva en cadena. Algunas expectativas de analistas académicos señalan que el PIB del segundo semestre no alcanzará para sacar a la economía del hoyo de -8% a -10% para todo el año. Sin embargo, la peor parte estará en 2021: mientras las primeras estimaciones en lo general señalan un PIB de 2% positivo, los analistas académicos consideran que el PIB sería de -1% a -2% porque la desarticulación de la plana productiva, el empleo y la demanda será demasiado baja como para impactar expectativas.
Abusos de la Coca Cola. Con el pretexto de rendir homenaje al personal que lucha en hospitales contra la pandemia del coronavirus, la empresa Coca Cola difunde un comercial en el que pasa lista a los sectores involucrados, pero en cada uno de ello ilustra con el logo de cada uno de los productos de la empres. En realidad, la Coca manipula los sentimientos de la gente con los médicos y enfermeros, pero en el fondo está haciendo propaganda para su producto. Así gana dinero y fama, pero no ayuda al personal sanitario.
Política para dummies: La política es la sensibilidad para entender lo que viene y decidir a tiempo para evitarlo.