Libros de ayer y hoy
Little boy se llamó la bomba asesina que cayó en Hiroshima, Japón, en una fecha establecida entre el 5 y el 6 se agosto de 1945. El avión se llamaba como la madre del piloto: Enola Gay Tibbets. Por muchas razones no solo por haber recibido la vida, la gran mayoría de los seres humanos aman, respetan y defienden a su madre. Por eso ante mucha gente del mundo causó asombro que el piloto que lanzó la bomba atómica sobre Hiroshima, le pusiera al avión el nombre de su madre, el gran orgullo de Paul Tibbets. Quien además se vanagloriaba desde el día de la prueba el 31 de julio, cuando ya tenía claro cual era su designio. Y el asombro creció cuando el avión de regreso de su misión a la isla Tinian, fuera recibido con grandes celebraciones y fiestas. Atrás, poco más de doce horas antes, habían quedado alrededor de 80 mil muertos, 70 mil heridos y 69 por ciento del pueblo destruido. Esa fue la gran hazaña de Estados Unidos en su guerra contra Japón, la que definió independientemente de otros menesteres guerreros, la imagen real de lo que son los imperios. Que se ratifica 79 años después, en el apoyo de ese país, a las muertes cotidianas de inocentes en Palestina, de parte de Israel.
MUCHA GENTE SE PELEABA POR CONSEGUIR TROCITOS DEL AVIÓN ENOLA GAY
El avión que había matado a tanta gente, era un B 29 de la Fuerza Aérea estadounidense que según la historia que siguió a su descenso, fue instalado en tierra por mucho tiempo, al grado de que se fue destruyendo y la gente empezó a ir por el orgullo de tener un trocito de sus partes y recordar el gran triunfo gringo. La historia de Hiroshima conmovió al mundo y hasta una famosa película de Alain Resnais, Hiroshima mi amor (guión de Tusquets 2013), fue premiada con su nombre. Fue uno de los baluartes que usó el país del norte como castigo, aparte del que recibió Japón por su comportamiento en la Segunda Guerra Mundial. La exhibición por décadas de los que quedaron heridos fue el testimonio de como los poderosos pelean desde arriba, para cubrirse con la gente inocente. Pero mientras, la historia del Enola Gay seguía, porque desde 1984 había sido reconstruido y posteriormente fue dejado en Washigton para centrarlo hasta el momento en el Centro Steven Fuduar – H azy, junto al aeropuerto de Washington Dulles, donde es una atracción turística.
MM. LA DESTRUCCIÓN IMPERIAL TAMBIÉN ES INDIVIDUALISTA
Veintisiete años después de aquel asesinato masivo de la Little Boy, se dio un caso individual que también conmovió el mundo: la muerte de Marilyn Monroe . El 5 de agosto de 1962, la bella actriz que después se convirtió en símbolo fue encontrada muerta al parecer por suicidio, aunque siempre hubo dudas sobre el deceso. Famosa en aquel entonces no solo por su belleza, sino por su cercanía en matrimonio con personajes como el escritor Arthur Miller y el deportista Joe Dimagio, la llamada MM por sus iniciales, tuvo amores y cercanía con dos de los Kennedy, John y Robert, lo que fue mencionado en muchas ocasiones como
una señal de su muerte. Lo que ella llegó a saber, lo que supo, quizá se concretó más de un año después, en noviembre de 1963, con el asesinato de John F. Kennedy, y dejó muchas dudas en el aire. Y hubo quienes al respecto se referían al escaso valor de la vida de un ser humano, en lo imponente y destructivo, de un imperio. MM solo tenía 36 años.