Poder y dinero
● El presidente desesperado porque no se dan los elementos para el linchamiento de adversarios en caso Lozoya, culpará al Fiscal de no dar a conocer al pueblo “la verdad”.
Vaya dilema en el que metió Andrés Manuel López Obrador al Fiscal General Alejandro Gertz Manero al pedir que se difunda el video que presentó Emilio Lozoya Austin en la dependencia.
Primero, si el Fiscal presenta el video o lo filtra, echará a la basura la autonomía y todo mundo dirá, con razón, que la dependencia es un apéndice de Palacio Nacional, y Gertz un pelele de Andrés Manuel.
Segundo, el debido proceso dicta que ninguna de estas pruebas puede ser difundida en el proceso en los medios de comunicación por la Fiscalía o el Poder Judicial, a quién también López Obrador extendió la petición.
Tercero, de no darse a conocer los elementos para el linchamiento orquestado desde Palacio, entonces será culpa del Poder Judicial de Arturo Zaldívar Lelo de Larrea y de Gertz Manero la ‘opacidad’ y el ocultamiento de la verdad al pueblo bueno que merece “que la vida pública sea haga cada vez más pública”.
En el cuento mañanero de ayer, el narrador asume que los dichos del ex director de Pemex es la verdad pura, por eso dice: “que el pueblo sepa la verdad”, así que los jueces de Zaldívar pueden ahorrarse la chamba, la palabra de Lozoya es ley. Punto.
Me imagino que López Obrador debe estar arrepentido de haber propuesto a Alejandro Gertz para la Fiscalía, ya que podemos inferir que si el presidente le pide en público que revele declaraciones y pruebas, es porque en privado se negó a hacerlo.
Ya después en el cuento mañanero Andrés Manuel quiso componerle pero lo desarregló, además del vergonzoso entuerto al decir: “El juez principal sobre este asunto (Lozoya) al que le tengo confianza es el Fiscal Gertz Manero”.
Y aunque sabemos que el presidente está acostumbrado a ser juez y parte, lo dicho es una aberración brutal, simplemente porque el caso Lozoya no produce el escándalo de lucro electoral que espera la Cuarta Transformación.
Pero el que sí está metido en un lío es el gobernador de Querétaro Francisco Domínguez Servién quien de inmediato cesó a su Secretario Particular Guillermo Gutiérrez Badillo para que contribuya en el esclarecimiento y deslinde de responsabilidades del video difundido donde recibe grandes cantidades de dinero, presuntamente de sobornos.
¿A poco los secretarios particulares no son hombres de toda la confianza de quien los nombra..? aunque se dan casos como el de César Nava Vázquez que parece que el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa lo sacó de la cueva de Alí Babá.
El también ex presidente del PAN sigue en la impunidad a pesar de la demanda de Pemex en Nueva York en diciembre del 2012 en funciones de director jurídico de la paraestatal del 2001 al 2003 por participar en una conspiración para defraudar a la petrolera.
Nava impidió en el 2002 que la petrolera cobrara dos cartas de crédito por 102,8 millones de dólares que servirían para compensar violaciones contractuales de Siemens y SK Engineering en las obras de reconfiguración de la refinería de Cadereyta, en el norte del país.
Ahora Marko Cortés Mendoza quiere expulsar de Acción Nacional al particular de Pancho Domínguez Guillermo Gutiérrez, pero ya que está en esas que cheque el historial de Christian Von Roherich, diputado de la CDMX y ex delegado de Benito Juárez con los grandes mañas inmobiliarias que debe conocer muy bien el ahora alcalde Santiago Taboada Cortina, y puede seguirle con algún vicecoordinador de su bancada en San Lázaro.