Sheinbaum presenta presupuesto 2025: completo, balanceado e inclusivo
Morelia, Mich., 15 de abril, 2017.- Si alguien duda que los hijos son la mayor felicidad, tienen razón en parte, pero también un gran dolor de cabeza, que le pregunten al ex gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, o al ahora ex secretario de gobierno de Oaxaca, Alejandro Avilés Álvarez.
Y es que ambos, llegaron al grado de verse obligados a dimitir de sus cargos públicos, como consecuencia de acciones cometidas por sus vástagos. No les quedó de otra. Tomando el caso más reciente, el portal www.oaxaca.quadratin.com.mx publicó la tarde de este jueves una nota exclusiva, en la que se denunciaba que el hijo del secretario general de gobierno de Oaxaca, Alejandro Avilés, utilizó un helicóptero oficial para irse de vacaciones a Puerto Escondido.
No pasaron ni 12 horas de la denuncia cuando el secretario de gobierno renunció al cargo, y además pidió una disculpa pública por la acción cometida por su hijo. Y se llevó entre las patas al coordinador de Transportes Aéreos del Hangar oficial de gobierno, José Álvarez Romo, quien fue destituido por el gobernador Alejandro Murat.
En lo que se refiere a Michoacán, algo similar sucedió con el ex gobernador Fausto Vallejo Figueroa, luego de que su hijo Rodrigo fue exhibido en un video, departiendo alegremente con el entonces líder de la célula criminal conocida como Los Caballeros Templarios.
En los dos casos, como lo hemos dicho en otras ocasiones, lo malo no es que delincan, sino que los cachen. Y en ambos, el padre pagó las consecuencias.