Frente a la guerra
¿Ángel Aguirre candidato de Morena?
El domingo pasado Andrés Manuel López Obrador defendió el nombramiento de Félix Salgado Macedonio como precandidato a senador de Morena en Guerrero. Así lo explicó: “Lo decidieron los guerrerenses, eso es lo que no entienden los de la mafia del poder y sus achichincles, piensan que son imposiciones. Son procesos democráticos. Hacen encuestas de acuerdo a los estatutos y, por eso, se elige a los coordinadores”.
La referencia de López Obrador a la “mafia del poder y sus achichincles” sugiere que quienes criticaron la designación de Salgado Macedonio pertenecen a ese círculo exclusivo; sin embargo, no es la mafia del poder la que reprobó el sorpresivo reclutamiento del antiguo “diputado costales”, que no es sino una designación de López Obrador, sino la dirigencia y numerosos integrantes de Morena en el estado de Guerrero, que con toda razón se sintieron humillados y relegados después de haber construido el partido durante cuatro años.
Es posible que se haya realizado la encuesta que sustentó la decisión, pero aun en esas condiciones es inexplicable que en ese estudio haya sido incluido un militante del PRD. Cuando el 28 de octubre fue designado coordinador de organización en Guerrero, Félix Salgado aún no renunciaba a ese partido, pero desde tres años atrás dejó correr la versión y aparentaba que ya no era perredista. En todo caso, habría que preguntarse si la encuesta fue diseñada para que Félix Salgado saliera en ella como el más conocido, lo que no era difícil de conseguir, porque efectivamente es conocido no sólo en Guerrero, sino en todo el país, pero no por su obra política sino por sus borrachazos.
Menos de quince días después, es evidente que el nombramiento de Félix Salgado provocó una fuerte división en Morena-Guerrero. Los dirigentes morenistas se han tenido que amarrar la lengua para no contrariar a López Obrador, pero ni así logran contener la indignación que el hecho les provoca. Son muchos los motivos que alimentan el rechazo a Félix Salgado, desde la forma de su nombramiento hasta la trayectoria pútrida que rodea al ex perredista, incluidos los señalamientos de haber pactado con el crimen organizado en Acapulco. El ex alcalde pudo engañar a López Obrador, pero en Guerrero no engaña a nadie. Y al contrario de lo que dijo el presidente nacional de Morena, la mafia del poder es quizás la menos interesada en atacar a alguien que con toda seguridad arrastrará a ese partido hacia su abismo personal. Ya empezó.
Quienes leyeron la edición de ayer de La Jornada Guerrero, diario propiedad de Salgado Macedonio, habrán notado un claro mensaje –prácticamente una invitación— dirigido a los ex gobernadores Zeferino Torreblanca Galindo y Ángel Aguirre Rivero. Nada crípticos, los mensajes aparecieron en el editorial del diario en la página dos, y en el comentario que se publica en la última plana bajo el encabezado de “Trasmallo”. La invitación es a que sean candidatos de Morena. El título del editorial es “¿Ni Aguirre ni Zeferino?, ¡quién sabe!”, y los signos de interrogación hacen referencia a declaraciones previas de dirigentes de Morena en el estado contra la posibilidad de que alguno de esos personajes, o los dos, sean candidatos, en cuyo caso advierten de una desbandada de militantes.
Los textos no dejan duda sobre su intención, pues exaltan las virtudes de ambos ex gobernadores. Llama la atención la elogiosa descripción de Zeferino Torreblanca, de quien La Jornada Guerrero dice que es un buen administrador y que así lo demostró como alcalde de Acapulco y como gobernador de Guerrero en el sexenio 2005-2011. Según se entiende de la lectura del “Trasmallo”, la expresión “quién sabe” alude al hecho de que la decisión sobre los ex gobernadores será de la dirigencia nacional de Morena, es decir de López Obrador, y no de la dirigencia en el estado, aspecto que establece con nitidez la profunda división entre Félix Salgado y el comité directivo estatal. Hasta donde puede verse, nada de todo esto lo preparó la “mafia del poder”.
No tendría nada de particular que dos ex gobernadores fueran invitados por un partido. Pero es realmente sorprendente que después del nombramiento de Félix Salgado, precisamente estos dos ex gobernadores reaparezcan tratando de treparse a Morena con ayuda del que parece ser representante de López Obrador. Porque se trata de ex gobernadores repudiados, con gruesos y sensibles expedientes abiertos, y que son los responsables de las calamidades que en este momento lastiman al estado. No hay en Guerrero enemigo más grande de la izquierda que Zeferino Torreblanca, quien se disputa esa condición con Rubén Figueroa Alcocer, y por cuanto hace a Ángel Aguirre, carga con la responsabilidad de la desaparición de los 43 estudiantes normalistas. A ellos invita Félix Salgado a ser candidatos de Morena.
Es perceptible que la gestión de Félix Salgado en favor de los dos ex gobernadores del PRD refleja viejos intereses y compromisos, que dudosamente son del conocimiento de López Obrador. Conviene por esa razón preguntar si el interés de Félix Salgado por llevar a Ángel Aguirre y Zeferino Torreblanca a Morena tiene el aval de López Obrador, como podría concluirse de la lectura de los mensajes publicados en su periódico, o si esta iniciativa es un temprano borrachazo del coordinador de ese partido en Guerrero. Como sea, al defender a Félix Salgado, López Obrador defiende estas graves incongruencias que asoman en Guerrero y que amagan con desestabilizar a su partido.
Renunciaron contra Aguirre y ahora lo invitan
Saúl López Sollano, Eloy Cisneros Guillén, Misael Medrano Baza y otros destacados ex dirigentes perredistas de Guerrero renunciaron al PRD en diciembre de 2014 en repudio al gobierno (perredista) de Ángel Aguirre por el ataque contra los normalistas. En la conferencia de prensa en la que anunciaron su decisión dijeron que Félix Salgado también había renunciado, lo que fue una mentira. Con ellos, Salgado Macedonio emprendió hace un año una campaña de propaganda en favor de López Obrador, que finalmente fructificó en su nombramiento hace diez días. Renunciaron en repudio a Ángel Aguirre, ¿y ahora lo invitan a ser su candidato? ¿Respaldan esa invitación? ¿Dirán algo o callarán? [email protected] otropaisnoticias.com