Feria del libro de Guadalajara
El régimen democrático en México atraviesa por momentos de extrema gravedad que ponen en peligro la observancia de derechos humanos y libertades. Ello exige que los partidos políticos de oposición estemos listos para actuar en la defensa de las conquistas ciudadanas. Y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) lo está.
Surgido en el contexto posrevolucionario, el PNR-PRM-PRI ha sabido traducir el clamor popular de paz y estabilidad, así como las necesidades sociales en políticas públicas sustentadas en instituciones gubernamentales que atienden y resuelven esas exigencias. Instituciones que hoy continúan vigentes, aunque debilitadas por la cerrazón.
A lo largo de 94 años, el PRI ha evolucionado a la par que la sociedad gracias al impulso de sus fuerzas internas que lo dotan de los ideales y respuestas que el pueblo exige. Ya sea en el Poder Ejecutivo, en los Congresos o en los Ayuntamientos, la ideología priista de justicia social está presente.
La democracia forma parte de nuestro ADN porque ella es nuestra naturaleza y nuestro marco de actuación. De ahí que no podamos permanecer indiferentes ante la amenaza real e inminente de autoritarismo del actual partido en el poder.
Como nunca, hoy desde el gobierno se busca aniquilar a la oposición, debilitar a los poderes públicos, acallar las inconformidades, doblar a los medios de comunicación, desoír a las comunidades indígenas, agraviar a los familiares de víctimas, debilitar a las instituciones educativas, empoderar al crimen, fomentar la corrupción, centralizar el poder público y dividir a los mexicanos.
¡México nos necesita!
Nuestro partido no solo es un organismo electoral, sino sobre todo la expresión de una ideología política en torno a la cual se organizan las fuerzas sociales y fijamos posición frente a los problemas de la realidad.
La justicia social y la democracia están más vigentes que nunca frente al populismo de extrema derecha que caracteriza indudablemente al actual partido en el poder, que con el disfraz de izquierda busca acabar con los derechos y libertades sociales.
Porque revitalizar significa, por igual, dar fuerza al todo y a las partes que lo constituyen, el PRI se erige en la fuerza política actuante que aglutina el pensamiento de avanzada que sí responde a la realidad del México del siglo XXI, teniendo como piedra angular al régimen democrático.
La militancia, sectores, organismos, agrupaciones adherentes y cuadros del PRI estamos unidos y comprometidos con los altos intereses de la República y por ello, hemos presentado una acción de inconstitucionalidad en contra de la ruin reforma antidemocrática que busca el partido en el poder.
El PRI está dedicado de tiempo completo a México y a él respondemos.
*Presidente Nacional del PRI.