Libros de ayer y hoy
Se trata de una verdad que está a la vista de todos.
Y es que en los gobiernos del Partido Morena –tanto el federal como los estatales y municipales–, la vida no vale nada y los ciudadanos no solo estamos solos sino a merced del crimen organizado.
Y el mejor ejemplo es el mes de julio del 2024, que resultó letal para líderes empresariales y políticos que toda su vida trabajaron en entidades que hoy “mal gobiernan” los “narco-mandatarios” impuestos por el crimen.
Dicho de otro modo, resulta que, en los hechos, los gobiernos de Morena son incapaces de cumplir la razón fundacional del Estado; que no es otra cosa que la defensa de la vida y los bienes del ciudadano.
Sí, en los hechos, el Partido Morena, sus políticos y gobernantes no son más que eslabones de una mafia criminal cuyo principal objetivo es imponer su fuerza criminal en todo el país, además de robar el dinero público.
Y es que tanto el gobierno federal, que encabeza López Obrador, como los gobiernos estatales y municipales que están en manos de Morena, son el mejor ejemplo de la ingobernabilidad y la muerte del Estado.
Y si tienen alguna duda sólo basta revisar los crímenes más relevantes ocurridos en el pasado mes de julio, en donde líderes empresariales como xxx y xxx, además del ex rector de la UAS y diputado federal por Morena, xxx. fueron abatidos por las balas del crimen organizado
En efecto, los reputados empresarios de Baja California y Tamaulipas, además del reconocido político sinaloense, fueron abatidos en circunstancias nada casuales y, más bien los mataron como respuesta del activismo contra la impunidad de los grupos criminales.
Sí, en los tres casos, sicarios del crimen organizado abatieron a tiros a los líderes de empresa y al diputado federal electo, en acciones criminales que confirman que vivimos bajo la amenaza permanente de la “narco-política”.
Es decir, que las bandas criminales son, en los hechos, el brazo represor de la “narco-dictadura” de López Obrador.
Un poder fáctico que ha convertido a todo el país en tierra fértil para los negocios de la “narco-economía” que a diario se adueña de nuevos territorios a costa de la vida de empresarios y políticos, mientras que en Palacio el presidente dice que nada saben de operativos como el llevado a cabo por el gobierno norteamericano y que terminó con la captura de los más importantes jefes del Cártel de Sinaloa.
Todo ello mientras que los lacayos de Obrador dicen que no se han enterado, que nada saben y que son inocentes de toda posible delación. Sí, en los hechos gritan al mundo lo más parecido al clásico “¡yo no fui!”.
Incluso en Palacio suplican por el perdón ante toda posible infidencia oficial que pudiera haber facilitado la captura y extradición de “El Mayo” y del hijo mayor de “El Chapo”.
Sin embargo, lo que no saben en Palacio es que nadie les cree, sea en México o sea en el mundo. Y es que resulta inverosímil la “chabacana” versión de que el gobierno mexicano nada sabía de la identidad de El Mayo” y de el hijo mayor de “El Chapo”.
Lo cierto es que en México y en el mundo todos saben que el Cártel de “El Chapo” tampoco es ajeno al financiamiento de la candidatura presidencial de la señora Claudia Sheinbaum, la espuria sucesora de López Obrador.
Por eso, porque debemos insistir en el peligro de los “narco-gobiernos” estatales, volvemos al Itinerario Político del 26 de mayo del 2021, titulado: “¡El Crimen Organizado ya votó por Morena!”, en donde advertí del peligro de la participación de las bandas del crimen en la “elección intermedia”
Así lo dije: “Las bandas criminales también votan. Y en la elección del 6 de junio del 2021 los barones del crimen ya decidieron su voto… y el voto de esos grupos criminales en la elección más grande de la historia se llevará a cabo mediante métodos nada convencionales.
“En realidad las bandas criminales imponen “los usos y costumbres” de los grupos mafiosos; la plata, el plomo, el secuestro y las amenazas. Pero, además –y por pura casualidad–, el voto mayoritario de los criminales resultará favorable al partido oficial, Morena.
“¿Y cómo sabemos que los criminales organizados votarán en su mayoría por el partido de López Obrador?
“Elemental, porque el 60% de los hechos violentos ocurridos a lo largo de la elección –crímenes, amenazas y secuestros–, alcanzaron a candidatos, precandidatos y políticos identificados con la alianza PRI, PAN y PRD.
“Sólo 17% de los ataques fueron lanzados contra precandidatos, candidatos y políticos vinculados con Morena, mientras que el restante 23 por ciento fue dirigido contra políticos de otros partidos.
“De esa manera, de los casi 100 precandidatos, candidatos y políticos vinculados a partidos –que han sido asesinados–, por lo menos 60 se identificaban con la coalición del PRI, PAN y PRD, mientras que sólo 17 pertenecían a Morena y los restantes 18, a otros partidos.
“Sin embargo, lo peor está por venir. ¿Por qué?
“Porque según fuentes castrenses, todo puede pasar en estados como Baja California, Baja California Sur, Guerrero, Michoacán, Morelos, Nayarit, Colima, Oaxaca, Sinaloa, Sonora y Zacatecas, entidades en donde el crimen apuesta por el control estatal y municipal, para favorecer al partido Morena.
“Incluso, el 90% de los más de 800 ataques que se han producido contra políticos, precandidatos y aspirantes a un puesto de elección popular, son contra funcionarios del nivel estatal y municipal….
“Por eso, altos mandos de inteligencia militar advierten sobre el peligro de que el día de la elección, el domingo 6 de junio, se produzca el mayor fraude de la historia; un fraude en donde la plata y/o el plomo podrían ser la mayor divisa electoral… Y ese fraude de Estado, verdadera “narco-elección”, será tolerado por las autoridades de no pocas entidades del país. Al tiempo”. (FIN DE LA CITA).
Y como lo pronostique aquel 26 de mayo del 2021, la “elección intermedia” fue un día de campó para los grupos criminales, que atraparon las entidades del llamado Corredor de Pacífico, su mayor zona de influencia.
Y así lo dije luego de la esa elección, en el Itinerario Político titulado: “¿Ganó Morena o ganó el narco?”, del 9 de junio de ese 2021: “¿Cuál fue el impacto real de las bandas criminales en las recientes elecciones estatales? ¿Es casual que Morena haya ganado todo el corredor del trasiego de drogas, controlado por cárteles criminales, aliados al gobierno, como Sinaloa y CJNG?.
“Lo cierto es que en política no hay casualidades y son muchos los indicios de que el gobierno de Obrador no sólo pagó a las mafias criminales con una amnistía de facto sino que, en el extremo de la debilidad del Estado, les entregó gobiernos estatales completos”. (FIN DE LA CITA)
Sí, hoy queda claro que gracias a López Obrador, todo México es territorio del “narco”. Sí, se los dije.
Al tiempo.