El PAN saldrá fortalecido con su elección interna de cara a comicios del 2027
CIUDAD DE MÉXICO, 28 de septiembre de 2020.- El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), órgano de gobierno del Senado de la República, Ricardo Monreal, se reunió con representantes de la industria farmacéutica nacional para revisar las iniciativas de ley para garantizar la calidad y el costo de medicamentos.
En el Senado de la República existen iniciativas en la materia, las cuales se encuentran atoradas en comisiones, entre la que destaca la presentada por el coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, el 19 de febrero del año pasado, misma que propone reformar el artículo 31 de la Ley General de Salud con el objetivo de regular el precio de medicamentos e insumos para garantizar que las personas de bajos ingresos accedan a ellos, debido a que en México su valor llega a ser hasta tres veces más caro que en otros países de América Latina.
En su iniciativa, el senador de Morena arguye que el estudio The Big Pharma Proyect/La vida tiene precio, realizado por el medio digital Ojo Público, en el país algunos medicamentos para tratar diabetes, cáncer y VIH llegan a ser hasta tres veces más caros que en otros países de América Latina.
Como ejemplo, este estudio refiere que medicamentos como Glivec, utilizado para tratar cáncer, cuesta en México 163 dólares; en Perú, 44 y en Colombia, 69; asimismo, la insulina Lispro, utilizada para tratar a pacientes con diabetes, en el país llega a tener un costo de 89 dólares; en Colombia, 49; en Perú, 65 y en Guatemala, 31; por otra parte, una pastilla de Lopinavir, para el tratamiento de VIH, en México cuesta siete dólares, mientras que en Perú, dos; en Colombia, 0.8 y en Guatemala, dos.
Otro dato relevante es el que señala que el 80 por ciento de los antirretrovirales en México está en manos de un oligopolio de farmacéuticas que encarecen las terapias.
A finales de julio de este año, el Pleno del Senado de la República aprobó en sesión extraordinaria, con la mayoría de votos de Morena y aliados, la reforma que permitirá al Estado mexicano comprar medicinas en el extranjero.
Con 56 votos a favor, 35 en contra y una abstención, la Cámara Alta avaló el dictamen que modifica el artículo 1º de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, y fue turnado al Ejecutivo federal para su decreto.
El proyecto de decreto fue promovido por el diputado de Morena, Mario Delgado Carrillo, y adiciona un párrafo quinto a dicha legislación para quedar como sigue:
“En el caso de la adquisición de bienes o prestación de servicios para la salud, cuando de la investigación de mercado se concluya que la licitación no es la vía idónea para asegurar al Estado las mejores condiciones conforme a lo previsto en el artículo 134 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, las dependencias y entidades, previa autorización de la Secretaría por conducto de la Oficialía Mayor, podrán contratar con organismos intergubernamentales internacionales a través de los mecanismos de colaboración previamente establecidos con éstos, sujetándose para ello a las reglas y procedimientos que rigen a los mismos”.
La Cámara de Diputados aprobó que las dependencias y entidades, previa autorización de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), por conducto de la Oficialía Mayor, podrán contratar con organismos intergubernamentales internacionales a través de los mecanismos de colaboración previamente establecidos con éstos la adquisición de bienes o prestación de servicios para la salud.
El Grupo Parlamentario del PRI justificó su votación en contra por considerar que atenta contra la transparencia, las farmacéuticas nacionales, abre la puerta a la corrupción y contribuye a una política de estado en materia de salud que ha probado ser errática.
Eliminar las licitaciones públicas vulnera el artículo 134 constitucional y hacer compras en el extranjero va a generar desabasto, precios más altos y sí se opta por comprar barato, riesgos sanitarios graves, arguyó.
Criticó que en lo que va del sexenio se ha demostrado que el desabasto de medicinas es causado por la falta de programación del Gobierno federal, no por falta de oferta nacional y no es porque en México no se produzcan los insu