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TLAXCALA, Tlax., 20 de febrero de 2020.- La rifa del avión presidencial y la venta de cachitos es una tomada de pelo para los mexicanos, además que citar a empresarios a una cena en el Palacio Nacional ha sido para doblar de brazos a los hombres de negocios que no les ha quedado más que aceptar, sostuvo el presidente de la Cámara Nacional de la Transformación (Canacintra) en Tlaxcala Marcos del Rosario Haget, quien rechazo esta acción del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) la cual considero irrisoria.
En un acercamiento con los medios de comunicación para anunciar los cambios de la presidencia de esta organización en Tlaxcala, el nuevo dirigente empresarial dijo que hasta el momento no ha tenido indicaciones de su presidente nacional sobre este tema, pero que en una reunión que sostendrán el próximo 2 de marzo en la capital del país, conocerá más a detalle y podrá pronunciarse al respecto.
No obstante, a pregunta expresa sobre este tema donde fue cuestionado si la Canacintra en Tlaxcala comprará cachitos para la rifa del avión presidencial dijo, “creo que esa parte es una tomada de pelo para todos los mexicanos con todo respeto y lo que está haciendo el presidente, en ese tipo de reuniones es doblar de brazos a los empresarios y están tenido que aceptarlo y ni modo, así es como están las reglas del juego el día de hoy”, acotó.
Además, expuso, que no está contento por esta medida que está implementando el Ejecutivo federal para obligar a los empresarios a apoyar su forma de gobernar.
De ahí que agregó, “no estoy contento y creo que muchos empresarios tampoco lo están, pero bueno, así es como están haciendo política el día de hoy”.
Además expuso, que este avión no se puede vender porque oficialmente no es del gobierno de México porque está en leasing (arrendamiento), por tanto no puede ser vendido hasta el año 2027 cuando termine de pagarse al Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) que fue quien compro en el año 2012 ese avión a la empresa Boeing y que cuando se liquide la deuda de arrendamiento contratada por 15 años con la institución bancaria, entonces la aeronave pasaría a formar parte de los activos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Ese avión no se puede vender hasta que termine el plazo y después que termine el plazo, puede comprarlo con el remanente de ese valor original y entonces después, podrá rifarlo o venderlo o hacer lo que quiera, pero primero tiene que ser dueño del avión y no es dueño y él lo sabe”, acotó al señalar que la rifa y venta de los llamados cachitos son un distractor para el país para no atender ni ver las cosas que no sirven ni funcionan en este gobierno.
Y agregó, “se me hace totalmente absurdo, un cachito de algo, mejor que lo haga la Lotería Nacional que meta más dinero (el presidente de México) y que saque más dinero de ahí, se me hace un poco irrisorio, el sabrá sus objetivos y la gente que lo está apoyando también sabrá sus motivos”, concluyó.