Moño monumental decembrino adorna inmueble en el centro de Tlaxcala
En su mensaje habló sobre la santificación de los Niños Mártires y de llevar la fe a las periferias.
TLAXCALA, Tlax., 30 de agosto de 2017.- “Hermanos he llegado a casa, regresó a mis orígenes”, refirió Julio César Salcedo Aquino en su primer mensaje a la grey católica en el Seminario de Nuestra Señora de Ocotlán, tras ser ordenado episcopalmente como obispo de Tlaxcala por el Nuncio Apostólico Franco Coppola, en representación de El Vaticano.
En el Seminario de la “Y” los más de 40 obispos de la república, diáconos y sacerdotes acompañaron al nuevo obispo de Tlaxcala en su recorrido de la capilla hasta el lugar de la ordenación pastoral, en medio de un camino de fieles decorado por alfombras de aserrín y flores.
El rito y recibimiento…
Así después de los ritos preparativos de la homilía y promesa del elegido después de la lectura del acta del Papa Francisco desde el Vaticano, se llevó a cabo la postración, ordenación y la imposición de las manos, seguido de la plegaria de ordenación y unción de la cabeza, así como de la ordenación principal y las entrega del libro de los evangelios, el anillo de esposa iglesia, la Mitra y el báculo pastoral.
Una vez de ser ordenado, los 40 obispos de la república realizaron el saludo episcopal después del Nuncio Apostólico Franco Coppola, el arzobispo de la provincia de Puebla, Víctor Sánchez arzobispo y del obispo de Ciudad Valles como co-consagrantes.
Los momentos más emotivos, fueron cuando el ex obispo de Tlaxcala Francisco Moreno Barrón dio el abrazo episcopal y los más de 10 asistentes de pie aplaudieron este encuentro, además de la colocación de la Mitra y báculo pastoral, así como las muestras de cariño de los feligreses que hicieron largas filas para entregar presentes al llegado a este obispado.
El mensaje del nuevo obispo…
Después de la comunión, el Nuncio Apostólico Franco Coppola presentó al nuevo obispo de Tlaxcala después de aceptar esta encomienda del Papa Francisco desde Roma para Julio César Salcedo Aquino.
Ahí dijo, “me ha concedido para servir a su pueblo, gracias monseñor Nuncio Apostólico Franco Coppola, a Víctor Sánchez arzobispo de la provincia de Puebla, Roberto Balmori obispo de Ciudad Valles co-consagrantes”, expuso.
A los más de 10 mil fieles dijo, “gracias por su presencia, oración y apoyo, son ustedes la fuerza de la Diócesis”, empero agregó “a todos los que han venido de diversos lugares para implorar el don del espíritu a fin de llevar la nueva encomienda, regreso a nuestras raíces tlaxcaltecas”, para ser refirió ser su José para guiar esta comunidad, ello al agradecer la presencia de los miembros de la familia Josefina.
Asimismo agradeció a las autoridades de las 3 órdenes de gobierno, diputados locales y la secretaría de Gobierno, Anabel Alvarado Varela, mostrar su gratitud al gobernador de Tlaxcala, Marco Antonio Mena Rodríguez.
Y el primer mensaje del nuevo obispo de Tlaxcala, giro en torno a 3 puntos “La misericordia de Dios”, donde dijo representa las cicatrices del dolor y la incertidumbre, para responder con la pastoral de la misericordia.
El segundo punto fue, “Los Niños Mártires”, donde dijo que la Diócesis recibirá el 15 de octubre el don del reconocimiento de la santidad de los 3 hijos de los pequeños frágiles, Niños de Tlaxcala, “Protomártires de América”.
“Son los más grandes hijos que ha tenido la iglesia que peregrina en Tlaxcala y por ser los mejores, recibieron el don más grande que puede recibir un discípulo de Jesús: el martirio”, expresó al pedir la intercepción y remarcar que es un signo del espíritu.
Asimismo dijo, que la vida de esta iglesia tendrá un antes y un después de la canonización de Cristóbal, Antonio y Juan.
EL tercer punto, “San José de Santa María”, encomendó al patrono de la iglesia universal el cuidado de toda la feligresía y señaló, “hermanos, oren mucho por mí para que se a un “nuevo José”, al servicio de la iglesia que peregrina en Tlaxcala”, acotó.
Empero invitó “¡Vayamos a las periferias geográficas y existenciales!, como nos pide el Papa Francisco”, dijo para llevar el testimonio de esta iglesia en estos tiempos de necesidad.
Así cabe destacar que en la historia del obispado de Tlaxcala, Luis Munive y Escobar fue el primer responsable de esta iglesia quien le siguiera Jacinto Guerrero Torres, Francisco Moreno Barrón y hoy Julio César Salcedo Aquino.
Finalmente agradeció al administrador diocesano, Jorge Iván Gómez Gómez, por el encargo que tuviera antes de su llegada, dijo el cuarto obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, para posterior hacer la toma de protesta y oficializar la primera misa de su mandato en la Catedral de la Asunción en la capital de la entidad.