Juegan diputados con el bienestar de los animales; aprueban nueva ley

TLAXCALA, Tlax., 15 de diciembre de 2022.- Los integrantes de la 64 Legislatura del Congreso local acordaron abrogar la Ley de Protección y Bienestar Animal aprobada en 2019 para crear una nueva ley denominada Ley de Bienestar Animal, la cual está plagada de inconsistencias y contradicciones que ponen en riesgo la vida de los animales.

Dicha ley incluye puntos de la polémica iniciativa de reforma a la Ley de Protección y Bienestar Animal presentada por la Diputada priista Blanca Águila Lima, misma que fue catalogada por organizaciones protectoras de animales como no progresista y de buscar catalogar a los perros y gatos en situación de calle como una plaga.

Asimismo, se incluyen puntos de la iniciativa que presentó la Diputada morenista Marcela González Castillo, la cual fue vista, en su momento, como una contrapropuesta a la de Águila Lima, sin embargo, es evidente que la nueva ley es más fiel a la que en su momento presentó la priista.

La nueva ley cede mayor parte de la operatividad para la creación de políticas públicas en materia de bienestar animal a la Secretaría de Salud y al O.P.D Salud Tlaxcala, aún cuando no cuentan con facultad para operar en el rubro del bienestar animal, toda vez que no cuentan con recursos públicos para tal fin.

Darle mayores atribuciones a salud, estaría abriendo paso a la continuidad de la captura de animales en situación de calle para su sacrificio al eliminarse el artículo 45 que impedía la captura injustificada de animales y el artículo 133 que prohibía el sacrificio injustificado de animales.

La nueva ley argumenta que la captura y el sacrificio se realizarán para evitar la proliferación de enfermedades zoonóticas para garantizar la salud de los humanos.

Si bien la nueva ley coincide con la que fue eliminada al catalogar a los animales como seres sintientes y con derecho a la vida, cae en diversas contradicciones e incoherencias, muestra de ello lo que se establece en el artículo 71 que dicta:

“Los perros o gatos que no hayan sido reclamados en el término que establece el artículo 66 de esta Ley, y que se encuentren en instalaciones de los Centros de atención canina y felina estatal y municipales, serán trasladados al Refugio Estatal de Bienestar Animal, para su resguardo temporal y posible adopción”.

Dicho artículo da por entendido que no se provocará ningún daño a los animales que han sido capturados en la vía pública, sin embargo, en el artículo 73 se dice todo lo contrario al establecer que:

“La eutanasia y sacrificio de los perros y gatos procederá bajo el único método autorizado por la NOM-033-SAG/ZOO-2014, y se dará cuando los animales no sean reclamados por sus propietarios en el término establecido en la presente Ley, estén enfermos o lesionados de gravedad, situación que será determinada por un profesional de la Medicina Veterinaria, con título y cédula profesional”.

Lo aprobado por los diputados también abre paso para que dentro del territorio tlaxcalteca se siga experimentando con animales para fines de salud humana, estableciendo que los experimentos deberán provocar el mínimo sufrimiento y, en caso de que el animal resulte con secuelas que le impidan seguir viviendo una vida plena, deberá ser sacrificado.

Por otra parte, la nueva ley crea el Consejo Consultivo de Bienestar Animal, el cual estará integrado por representantes de varias secretarias y precedido por la o el titular del Poder Ejecutivo en turno, relegando a la Coordinación de Bienestar Animal (CBA), la cual fue creada para hacerse cargo de las políticas públicas en materia de concientización al trato digno de los animales, a una simple secretaria técnica con derecho a voz y no al voto.

De igual forma, como lo establece el artículo 11, se obliga a los ayuntamientos a crear su reglamento de Bienestar Animal y a homologarlo con la nueva ley, sin embargo, la anterior ley también solicitaba lo mismo en su artículo tercero transitorio, y desde su aprobación en 2019 hasta la fecha, ya existían un total de 17 Municipios que contaban con un reglamento aprobado en cabildo y tres de ellos, que de manera fiel a lo que mandataba la ley crearon su reglamento, ya lo tenían publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado.

Con la nueva ley, todos esos ayuntamientos deberán homologar su reglamento ya aprobado, lo que significa que deberán crear y aprobar uno nuevo; es decir, un retroceso a las políticas públicas que se había puesto en marcha en la materia, pues se tira por la borda el tiempo y esfuerzo invertido, así como el trabajo que realizaba la CBA en conjunto con las presidencias municipales para dar cumplimiento a lo que exigía la ley en materia de tenencia responsable para erradicar el maltrato.

Finalmente, sin que exista recursos para tal fin, se incluye en la nueva ley la creación del Departamento de Arbitraje Médico Veterinario, el cual se encargará de mediar y evitar denuncias penales en contra de los profesionales de la salud que por omisión hayan provocado la muerte o el daño a la salud de un animal de compañía.