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Recomendación no garantiza la reparación del daño, advierte análisis
TLAXCALA, Tlax., 11 de noviembre de 2017.- Contenido en la Síntesis de la Recomendación emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), desde el pasado 21 de marzo por la contaminación de la Cuenca de Atoyac y promovida por diversas asociaciones civiles pro derechos humanos, se evaluó que, a cinco meses del documento 10/2017, permanece la negligencia y corrupción para el rescate del río.
Según el documento, de las autoridades federales y estatales que admitieron la recomendación, solamente el municipio de Tepetitla de Lardizábal, dirigido por el munícipe Carlos Fernández Nieves, se opuso a esta. Asimismo argumentan que la aceptación de la misma no garantiza el cumplimiento y las acciones necesarias para “remediar la violación de los derechos humanos”.
Incluso señalan que los afectados por la contaminación corren el riesgo de ser re victimizados por las mismas autoridades ya que el acercamiento ciudadano es lo último tomado en consideración para resolver el asunto.
También se hace hincapié en que el gobernador de Puebla, José Antonio Gali Fayad, promueve una campaña con el fin de delatar a los “enemigos del Atoyac”, teniendo presunto conocimiento de que la contaminación proviene de las industrias, por lo que consideran que esta campaña promueve la oposición entre los ciudadanos.
La síntesis esclarece además que la intención de instalar Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTARs), sin tener antes la formación de un Plan Integral de Restauración Ecológica o de Saneamiento, corresponde a una simulación, omisión, engaño, negligencia y corrupción.
En este sentido, destacan que, pese a la recomendación, no existe plena garantía de la reparación del daño ni la repetición del mismo, así como prevalece el riesgo de colusión entre las autoridades para simular la limpieza del río librando a empresas como: “Pemex, Bayer, Lamosa, Global Denim, Big Cola, Industrial Textil, Kimberly Clark, Porcelanite, Rassini”, entre otras y señalando como únicos culpables a los campesinos y pequeños productores en la cercanía de la cuenca.