Para el gobierno de Tlaxcala, la cultura es prioridad: Unesco

TLAXCALA, Tlax., 5 de octubre de 2022.- Para el gobierno de Tlaxcala, la cultura es una prioridad al nivel de otras necesidades como el medio ambiente, la educación o la seguridad, sostuvo Frédéric Vacheron Oriol, representante de la Unesco en México.

En entrevista posterior a la firma de la Declaratoria por Tlaxcala de la Unesco, Frédéric Vacheron destacó que la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, así como otras autoridades del gobierno federal y municipal, priorizan el desarrollo de políticas en turismo cultural para el beneficio económico y social de sus habitantes.

“No siempre la cultura es una prioridad de los gobiernos, y en Tlaxcala vemos que es una gran prioridad porque se ve a la cultura no solamente como una forma de lucir, pero también como una forma de transformar. Que pueda resolver problemas de violencia, de ética… es una fuerza muy grande”, manifestó.

Al respecto, señaló que el Patrimonio Mundial del Conjunto Conventual Franciscano no sólo debe estancarse en el reconocimiento, sino que debe ser fuente de iniciativas de impacto y vinculación hacia otros campos como el turismo o la gastronomía, de tal forma de que su conservación detone un aprovechamiento económico y social.

En relación a su cuidado, detalló que se deberá integrar un plan de manejo supervisado por la Unesco a la planificación del gobierno estatal y municipal, logrando el desarrollo de políticas públicas para no perder el valor universal y excepcional del convento.

“En los años anteriores, si bien se había reconocido, no se había visto al mismo nivel que prioridades como el medio ambiente, la educación, la seguridad… Hoy día, pretendemos que la cultura esté al mismo nivel”, dijo.

Finalmente, Vacheron Oriol adelantó que la Unesco está dispuesta a colaborar con el gobierno de Tlaxcala para desarrollar nuevas políticas publicas que fortifiquen un turismo sostenible, responsable y no depredador, así como capacitaciones a operadores turísticos para no ver a la cultura como un espectáculo superficial, sino como un recurso frágil y arriesgado, pero poderoso.