Pide cordura ex titular de CAIPTlax a comisionados del IAIPTlax

• Oficialismo se impone a la autonomía, dice Romero Cirio y vaticina «el peor desenlace» al interior del órgano garante;
• Pronunciamientos oficiales son para «eliminar al enemigo»

TLAXCALA, Tlax., 13 de marzo de 2018.- Derivado de las confrontaciones entre comisionados del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales de Tlaxcala (IAIPTlax), quien fuera titular de la ahora extinta Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIPTlax), Claudio Romero Cirio, hizo un llamado a la cordura por parte de los representantes de la transparencia en el estado.

Esto, lo plasmó en su columna titulada «IAIP Tlaxcala: ¿Violencia de género?» y publicado en el portal de Red por la Rendición de Cuentas (RRC); donde el ex funcionario externó que la ausencia de acción por parte del Consejo Nacional del Sistema Nacional de Transparencia, lo único que ocasionará es la destitución de los comisionados David Cabrera Canales y Francisco Morones Servín en un juicio político.

Lo anterior en vista de que, a 72 días de iniciado el 2018, la transparencia en el estado y los trabajos para garantizarla, continúan frenadas, así como vaticinó que la violación a la autonomía del Instituto culminaría en el peor desenlace.

Y es que, infiere, que los conflictos al interior del IAIPTlax, así como los pronunciamientos desde el legislativo estatal y representantes del ejecutivo local son una estrategia de desprestigio y consecuente destitución de los mencionados comisionados: «Mostrando así que el que se impone es el oficialismo, sin importar la autonomía constitucional del órgano», redacta.

Romero Cirio hizo además referencia sobre las acusaciones de misoginia entre trabajadores del IAIPTlax y comisionados donde concluye que tanto Cabrera Canales y Morones Servín han se han impuesto en el Instituto vía interpretación de la ley, así como Marlene Alonso Meneses, asumió una personalidad autoritaria.

«(…) sólo hace falta cordura, como elemento central de la capacidad política, para entender que como colegiado, los tres comisionados, deben ponerse de acuerdo y cómo se dice coloquialmente repartir bien el pastel», concluye.

AQUI la columna de Romero Cirio: