Solicita CNDH protección para Rogelia González en Juchitán
TLACALA, Tlax., 26 de junio de 2018.- A principios del año pasado, en el mes de abril para ser exactos, vecinos de los Reyes Quiahuixtlan, en el municipio de San Juan Totolac, se acercaron hasta esta redacción para mostrar su sorpresa y preocupación por la forma acelerada en que avanzaba una enorme construcción en pleno cerro.
«la cual además de llamar la atención por sus dimensiones, hacía dudar su origen, por el tiempo en que se construía, en a las afueras de la comunidad», denunciaron en aquel momento los vecinos.
Ante tal denuncia inmediatamente surgieron los comentarios en las redes sociales, tachando de «chismosos», «metiches» y hasta «mal pensados» a los denunciantes, señalando:
«La gente deberia preocuparse por la situacion economica y política que vive nuestro pais, y no handar inventando cosas de personas que realmente han trabajado y luchan dia a dia por progresar y construir un futuro mejor (sic)»
«PSD: NO HANDEN DE METICHES NI ENVIDIOSOS (sic)».
Asi les dijeron a los vecinos que hasta esta redacción hicieron llegar sendas quejas en las que señalaban:
“Originalmente pensábamos que pertenecía a narcotraficantes”, dijo un vecino que pidió el anonimato.
Y otro más enfatizó: “comenzaron a construir muy rápido y la hicieron muy lujosa, ya después comenzaron los rumores sobre la posibilidad de que iban a traer a algunas muchachas a trabajar aquí para hacer de la construcción una casa de citas”.
Al visitar la zona, en abril de 2017, los vecinos argumentaron que les preocupaba la posible instalación de un «antro» en su demarcación.
«sobre todo por los problemas que se viven en otros municipios de la entidad por haber permitido la instalación de construcciones que luego son dedicadas a negocios de este giro, tal y como sucede en el sur del estado»
En aquel entonces ninguna autoridad, ni municipal ni estatal dio razón de la construcción, pero en todo momento la apuesta fue que esa lujosa casa, una vez terminada, sería utilizada para la instalación de un centro nocturno o quizás sólo sería la casa de descanso de algún funcionario o empresario.
Sin embargo, después de poco más de un año, la sospecha se confirma, ya que tal y como lo denunciaron los vecinos a Quadratín en su momento, y de acuerdo a lo que se puede leer en el camino que conduce a la entonces sospechosa construcción, el lujoso edificio terminado sirve para albergar un centro nocturno denominado La Escondida, original nombre para un centro de diversión que está en medio de los cerros blancos del municipio de Totolac.