Este domingo habrá torneo de Rubik en Tlaxcala capital
Cientos de feligreses recorren las calles de Tlaxcala para acompañar la imagen de la Virgen
TLAXCALA, Tlax., 15 de mayo de 2017.- La madrugada de este lunes 15 de mayo se llevó a cabo la celebración de la tradicional baja de la virgen de Ocotlán en Tlaxcala, festejo que ya conmemora 476 años desde la primera vez que recorrió las calles de la capital, en conmemoración de su encuentro con el indígena Juan Diego, en 1541.
Durante el recorrido, la imagen de la Virgen visitó algunos de los principales templos en la capital como la parroquia de San José, la capilla de San Nicolás de Tolentino, la capilla de la Santísima Trinidad y la capilla del Pocito que, según la historia de la Virgen, fue donde manó el agua santa que salvó al pueblo tlaxcalteca de una plaga de peste.
La Virgen de Ocotlán fue cobijada por comerciantes del mercado Emilio Sánchez Piedras quienes agradecieron e hicieron sus comandas para el mejoramiento de su economía; en la Central Camionera, los transportistas, ante el clima de inseguridad que viven los trabajadores del sector, pidieron por el resguardo del gremio. Durante su andar algunas de las principales calles se cubrieron de vistosas alfombras de aserrín y pétalos de rosas, acompañada también por cientos de fieles con cánticos y alabanzas.
Al filo de las 10:40 las campanas del ex convento de San Francisco comenzaron a repicar para recibir a la virgen y sus feligreses en la Catedral de «Nuestra Señora de la Asunción», donde el presbítero Manuel Zamora encabezó la homilía donde pidió habla Virgen su intercesión ante: «un mundo que progresivamente va olvidando los valores de la verdad y el bien (…) por un mundo marcado por el egoísmo pedir por el agua de la caridad; en un mundo marcado por la violencia y la inseguridad el agua de la alegría».
En este sentido también pidió a la Virgen por el Administrador Diocesano para que guíe a la Diócesis de Tlaxcala ante la Santa Sede en el Vaticano y por la pronta elección de un nuevo obispo.