Un novillero tlaxcalteca en España, se prepara y busca alternativa

Pablo Martínez el “Finito”, ganó una beca para prepararse en la Escuela de Tauromaquia de la Comunidad de Madrid de José Cubero “Yiyo”, desde el Viejo Continente lleva 10 novilladas en diferentes Festivales, desde Palencia, Navarra, Valladolid y Madrid, entre otras plazas.

TLAXCALA, Tlax., 26 de enero de 2022.- El sueño de un tlaxcalteca lo llevó a España, esa es la historia de Pablo Martínez “Finito”, un novillero que se prepara en la Escuela de Tauromaquia de la comunidad de Madrid de José Cubero “Yiyo” desde hace cuatro años y con 10 novilladas en festivales de Palencia, Navarra, Valladolid y Madrid, entre otras plazas, desea muy pronto tomar la alternativa, ya sea en la Corrida de las Luces en su natal Huamantla o en Las Ventas.

Mientras tanto, dijo que se capacita y aprende, como novillero de becerros, sin caballo y próximamente a caballo, así es que pide a Dios y a la vida que, si esta es su suerte, le permita un día tomar la alternativa y ser matador, para sumarse a nombres reconocidos como Jorge “El Ranchero” Aguilar, Rodolfo Rodríguez “El Pana”, Rafael Ortega, Uriel Moreno “El Zapata” y José Luis Angelino, entre muchas otras figuras que Tlaxcala ha dado a la Fiesta Brava de México y el mundo.

“Mi apoderado dice, que es más fácil ser astronauta que un reconocido matador”, recuerda el “Finito”, desde Tlaxcala a unos días de partir nuevamente a España y regresar para participar en una corrida el 26 de febrero en Xaloztoc, para nuevamente en marzo regresar a la Madre Patria para quedarse y seguirse preparando.

La Fiesta Brava es una tradición que prevalece aún en las generaciones más jóvenes de tlaxcaltecas, quienes se enamoran de los ritos del capote y la muleta, para competir con las voces ya consagradas de la tauromaquia internacional, tal es el caso de Pablo Martínez «Finito», reconocido novillero huamantleco que desea convertirse en uno de los nuevos estandartes de esta festividad en Tlaxcala.

En entrevista con Quadratín Tlaxcala, Pablo Martínez, originario de El Carmen Xalpatlahuaya, comunidad perteneciente al municipio de Huamantla, mencionó que su afinidad por la Fiesta Brava inició desde los 8 o 9 años, momento en el que un tío paterno y sacerdote lo acompañó a su primera corrida de toros en la que estarían importantes figuras como Uriel Moreno «El Zapata», Arturo Macías «El Cejas» y Fernando Ochoa, quienes eran parte de este cartel.

Posterior a ello, comentó que iniciaría una estrecha relación con el matador potosino Guillermo Ibarra, y a pesar de la preocupación de su familia sobre esta profesión, logró salir del país y ser becario en la Escuela de Tauromaquia de la Comunidad de Madrid de José Cubero «Yiyo» de España, en la que lleva cuatro años entrenando y perfeccionando su técnica como novillero, ello después que la beca era inicialmente para un año, pero que se amplió y que le ha dado más seguridad y fortaleza para su profesión y la vida.

«Toda la vida he sido muy delgado y (mi familia) me decían que no. Mi papá siempre me ha apoyado, le debo mucho y estaría muy orgulloso de él por siempre luchar para yo lograr mi sueño», dijo.

Con nostalgia, confesó que tiene pocos amigos en Tlaxcala debido a sus metas internacionales y a los entrenamientos rigurosos, sin embargo, mencionó que su estancia en España logró formarle un carácter independiente y mucho más amigable, en donde también ha encontrado a grandes amigos que no siempre están relacionados con el arte de la tauromaquia.

«Me fue difícil ir a España, pero cuando por fin logré irme… fue un sueño. Estaba en el avión y me sentía feliz, “estoy logrando mi primer meta”. Pero también es una responsabilidad muy importante. Todo el mundo piensa que ir a España y prepararte vas a regresar a México, pues preparado, pero claro, te pesa esa responsabilidad y hay que aprovechar cualquier oportunidad», reflexionó.

De igual forma, recordó que su amor por la tauromaquia está relacionado íntimamente con la devoción religiosa, pues al ser educado como católico por su familia en Tlaxcala y posteriormente acompañarse de sus grandes amigos en España, actualmente rinde especial fervor a la Virgen de Guadalupe como “Buen mexicano”, la Virgen del Carmen porque es la patrona de su comunidad aquí en la entidad y a San Josémaría de Barbastro en Huesca, España, a quienes se encomienda en los momentos previos a sus presentaciones.

Gracias a esto, «Finito» ha participado en diversas Fiestas y Festivales taurinos en regiones españolas como Salamanca, Navarra, Madrid, Palencia y Valladolid entre otras, más dijo, su corazón desea incursionar de nuevo en las arenas mexicanas para dar a conocer la tradición, el esfuerzo y el potencial de la nueva generación de novilleros y matadores tlaxcaltecas.
Desde el año 2019, fecha que debutó de novillero sin caballos y participó en diversas novilladas y festivales, se encuentran.

1. Valdetorres de Jarama (Madrid) festival cortando 2 orejas
2. Pozuelo de Alarcón (Madrid) novillada cortando 1 oreja
3. Valdeolmos (Madrid) festival cortando 1 oreja
4. Cabanillas (navarra) festival cortando dos orejas
5. Baltanas (Palencia) novillada cortando dos orejas
6. Alalpardo (Madrid) novillada cortando dos orejas
7. Olmedo (Valladolid) novillada cortando 1 oreja
8. Carabaña (Madrid) novillada cortando 2 orejas
9. Colmenar de oreja (Madrid) festival cortando 1 oreja
10. Torrelaguna (Madrid) novillada cortando 2 orejas

Por otro lado, señaló que no todo es fácil durante las presentaciones de la Fiesta Taurina, pues al igual que él, los novilleros pueden sufrir lesiones al incursionar en este arte; en su caso, Pablo Martínez “Finito” recibió una cornada en su muñeca izquierda mientras toreaba en Segovia en el año de 2018 a pocos días de haber viajado a la Madre Patria, siendo esto su «baño de sangre» que, aunque fue difícil y estuvo solo, esto no lo limitó para seguir adelante con sus sueños.

A pesar de todos los contratiempos, «Finito» aseveró que desea convertirse en una figura consolidada de la Fiesta Brava en Tlaxcala, pues uno de sus grandes sueños es convertirse un torero consagrado, así como contribuir a la difusión y creación de nuevos espacios para reconocer la belleza del arte taurino en la entidad.

“Desde donde estés siempre puedes contribuir a la labor social”, dijo al recordar que aunado a su pasión por la Fiesta Brava, tanto en México como en España se ha dado tiempo para unirse a las causas sociales, porque aseveró, que eso es parte de ser empático con los demás, concluyó.