Se recuperó el Sistema de Salud para los tlaxcaltecas
COLIMA, Col., 27 de diciembre de 2019.- De acuerdo con datos de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud Federal, durante 2016 se registraron tres mil 602 casos de sífilis adquirida y para 2018 cinco mil 809, lo cual representa un aumento de 61.27 por ciento en tan sólo tres años.
Según dichas estadísticas, el Estado de Colima registró la mayor incidencia de dicha enfermedad, entre 2016 a 2018, seguido de Baja California; asimismo fue mayor en hombres y en una edad de 20 a 24 años tanto en población masculina como femenina.
En tanto que, según información de la semana epidemiológica número 50 del 2019, que comprende del 8 al 14 de diciembre, se han registrado seis mil 904 casos a nivel nacional, un aumento de 18 por ciento respecto al año anterior, sin embargo cabe señalar que los datos del presente año son preliminares e incluyen casos probables.
Además, la incidencia (número de casos nuevos entre cada 100 mil habitantes mayores de un año) aumentó casi dos puntos al pasar de 3 en 2016 a 4.72 en 2018.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos la sífilis es una enfermedad de trasmisión sexual, aunque también puede pasar de la madre al bebé durante el embarazo, que infecta el área genital, labios, boca o ano a causa de la bacteria Treponema pallidum.
Dicha enfermedad tiene tres etapas: la primaria, secundaria y terciaria; en la primera se presenta una pequeña llaga o úlcera abierta e indolora en los genitales, boca, piel o recto que sana por sí sola en tres a seis semanas.
La segunda etapa, que comienzan de cuatro a ocho semanas después de la sífilis primaria, puede causar erupción cutánea, generalmente en las palmas de las manos y plantas de los pies, fiebre, pérdida de cabello, cambios en la visión, dolores musculares y articulares, entre otros.
Si bien la información de la biblioteca de medicina señala que la sífilis puede tratarse con antibióticos, dicha enfermedad de trasmisión sexual puede propagarse muy rápidamente entre la fase primaria y la secundaria.
Sólo en personas que no reciben tratamiento se desarrolla la sífilis terciaria, donde los síntomas dependen de cuáles órganos hayan sido afectados, algunas afectaciones pueden ser daño al corazón que causa aneurismas o valvulopatía, trastornos del sistema nervioso central y tumores en la piel, huesos o hígado.