Hallan al Ophionereis, especie cavernícola, en cueva de Cozumel

COZUMEL, QRoo, 8 de septiembre de 2019.- Parece un pulpo alienígena con cinco brazos con púas, pero en realidad es una especie muy antigua de ofiuroideo, que data de la época de las cavernas, y fue encontrado en una cueva de Cozumel.

Científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México hallaron esta rara especie que, según sus estudios, por su ubicación está en peligro de extinción, ya que su hábitat está muy cerca de un complejo hotelero de Cozumel.

El hallazgo lo hicieron los investigadores del campus Yucatán y lo clasificaron como el tercer ofiuroideo cavernícola en el mundo.

La especie pertenece al grupo taxonómico de los equinodermos, y lamentablemente, está en peligro de extinción si investigadores y autoridades no lo protegen.

Su fotografía aparece en Molecular Phylogenetics and Evolution, y sus descubridores fueron Francisco Alonso Solís Marín, Heroen Verbruggen, Francisco Márquez Borrás, Andrew F. Hugall, Guadalupe Bribiesca Contreras, Tania Pineda Enríquez y Timothy O’Hara.

El Ophionereis commutabilis es una especie de ofiuroideo y le encontraron en la cueva el Aerolito, de Cozumel, Quintana Roo.

Es un animal marino de la especie de ofiuroideos, clasificado como equinodermo por sus púas en la piel (del griego ekhino que significa púa y derma, piel).

Es familiar de los erizos, estrellas, lirios y pepinos de mar y ahora puede desaparecer por culpa del hombre, pese a haber vivido miles de años en esa cueva.

Francisco Solís Marín, investigador del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología afirma que el animal revoluciona las investigaciones al respecto.

De más de dos mil especies de ofiuroideos documentados desde 2010, solo dos vivian en cuevas, uno en Japón y otro en Estados Unidos, pero ahora hay un tercero, en Cozumel.

El investigador destaca que este cavernario animal ha evolucionado para sobrevivir y la extensión de sus brazos, su cuerpo aplanado y sus colores son parte de esa adaptación a la cueva, donde las condiciones son extremas, porque hay muy poca luz, oxígeno y alimentos.