Por una alternancia en paz/Alejandro Moreno
Lamentable que los que dirigen a los transportistas en la modalidad de “combis” y taxis, amenacen, atreviéndose a anticipar: “La guerra ya empezó y hacemos responsable a esta 63 Legislatura, que es la peor en la historia, de los enfrentamientos que se generen en Tlaxcala…” (quadratintlaxcala. 13.02.2020. “El PAN y Morena “nos chingaron”: transportistas”)
La sola amenaza debiera ser motivo suficiente para cancelar las concesiones que tienen en su poder, como si fueran propiedad de los concesionarios, cuando en realidad son propiedad del Estado, quien tiene en todo momento la facultad de revocar tales concesiones.
La amenaza por sí sola, ya es un delito que debe ser denunciado y perseguido por la autoridad competente. Las empresas que representan a las aplicaciones que están operando en la entidad el servicio de transportes de pasajeros, deben ya proceder a las denuncias correspondientes, por los probables daños que les sean causados en sus domicilios como empresas, en los domicilios de sus conductores, en las unidades vehiculares y cuanto más, en la integridad física y vida de todos los que participan en las aplicaciones, en tanto la amenaza no deja lugar a dudas, claramente habla de que habrá enfrentamientos y de que “la guerra ya empezó”.
Como está de moda culpar a los medios, “Culpan a los periodistas de tener interés por las plataformas…” (quadratintlaxcala. 13.02.2020. “Arremeten transportistas contra comunicadores y gobernador”), no se quedaron atrás y también se sumaron al linchamiento de los medios de comunicación, que más que moda, es un linchamiento público que espero pare ya, pues nadie puede ni debe estar por encima de la libertad de expresión, incluyendo desde luego, en el caso que nos ocupa, la de los transportistas, que tienen libertad de expresar lo que a su derecho convenga, pero no tienen derecho a amenazar ni amedrentar. El propio presidente López Obrador ha dicho: “No se puede acusar sin pruebas” (Síntesis. 21.12.2019)
Luis Texis Hernández, no tuvo “pelos en la lengua” y expresó: “… los transportistas exigimos nuestros propios intereses y venimos a exigir…” (quadratintlaxcala. 13.02.2020. “Arremeten transportistas contra comunicadores y gobernador”)
Más claro, ni el agua. El sr. Texis Hernández, lo dice con todas sus letras: exigen sus propios intereses.
Él mismo echa por tierra, lo que en diferentes momentos han dicho otros compañeros suyos, en torno al tema, quienes han pretendido que veamos a los transportistas como si fueran la expresión del pueblo, cuando nadie les ha otorgado alguna representación popular y cuando siguen representando los intereses económicos de unos cuántos, de ellos mismos, de nadie más.
Algún legislador o legisladora, pretendiendo “defender” la reforma aprobada en materia de comunicaciones y transportes, señaló: “… es inconstitucional impedir que exista inversión extranjera en el servicio de transporte (lo que da posibilidad a que empresas como Uber operen)…” (quadratintlaxcala. 13.02.2020. “El PAN y Morena “nos chingaron”: transportistas”)
Baste decir solamente que si bien UBER no es una empresa mexicana, en Tlaxcala, en México y en el resto de los países donde opera, la empresa la constituyen, en este caso, socios tlaxcaltecas y mexicanos, que han decidido integrarse a la misma, para prestar un servicio que solicitan y usan otros y otras tlaxcaltecas y mexicanos.
Reynaldo Delgado, otro representante de los transportistas, “… argumentó que desde hace dos años este gremio taxista ha hecho mejoras a su servicio, a las tarifas, han incluido taxímetros y algoritmos…” (quadratintlaxcala. 13.02.2020. “Arremeten transportistas contra comunicadores y gobernador”)
Cualquiera que use servicio de taxi convencional, sabe perfectamente que no hay mejoras en su servicio, que siguen cobrando lo que quieren, desde luego, más caro y que los taxímetros, son solo adorno, pues no los usan.
Qué bien que los diputados locales se atrevieron a legislar en beneficio del pueblo que los eligió y no en beneficio de unos cuantos, quienes llevan beneficiándose muchas décadas, desde el siglo pasado.
Faltaron muchas cosas que incluir en la reforma en mención, pero por lo menos no dieron un salto atrás. Desde luego faltó ver hacia el futuro, hacia el uso de electricidad, del hidrógeno, baterías de litio y nuevas fuentes de energía que ya se están usando en el mundo.
Así como incorporar todos los elementos que favorecen y facilitan la movilidad de las personas y que no tienen que ver con el uso de vehículos automotores. Ojalá lo hagan antes de que concluya su legislatura.