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TLAXCALA, Tlax., 3 de marzo de 2022.- La Diputada Blanca Águila Lima presentó la iniciativa de reforma de adición y derogación a la Ley de Protección y Bienestar Animal del estado con la cual se pretende controlar, prevenir y erradicar la transmisión de enfermedades zoonóticas.
Dicha modificación, que ha sido catalogada por organizaciones defensoras de los derechos de los animales como contraproducente a los pocos avances que se tenían en la metería en la entidad, cambiará la denominación a la ley para quedar como Ley de Bienestar Animal para el estado de Tlaxcala, eliminando la palabra “Protección”.
La reforma propuesta por la legisladora priista coloca como prioridad la salud, pues busca que, con la intervención de los médicos veterinarios y del Centro de Atención Canina y Felina dependiente de la Secretaría de Salud del estado (Sesa) se emprendan acciones para reducir el riesgo de la proliferación de enfermedades que puedan ser transmitidas por perros y gatos hacía los seres humanos.
En ese sentido, se continuará con las viejas prácticas de captura de animales en situación de calle, catalogados como “animales abandonados” y que representen un riesgo para la salud y la seguridad, ya que se reformará el articulo 45.
Asimismo, se sigue fomentando la irresponsabilidad de los dueños al seguir abriéndole el paso a la donación de mascotas, pues si bien se plantea la concientización de la tenencia responsable, no se establecen mecanismos que eviten que una persona se vuelva a deshacer de una mascota.
Lo anterior con la justificación de “reducir en corto plazo la problemática de salud pública que genera la sobrepoblación canina”, pues de acuerdo a datos de las autoridades sanitarias, en la entidad existe un registro de 350 mil animales de los cuales derivan “problemas como lesiones y mordeduras”, enfatizándose que las mordeduras representan un problema de salud pública.
Por otra parte, se busca crear el Consejo Consultivo Estatal de Bienestar Animal que estará conformado por funcionarios y representes de organizaciones civiles, el cual deberá diseñar políticas encaminadas a concientizar sobre el bienestar de los animales, así como también se creará la Comisión Estatal de Arbitraje Médico que busca solucionar conflictos entre los usuarios y los prestadores de servicio; es decir, entre dueños de mascotas y personal médico veterinario del sector público.