Redacción/ Quadratín Tlaxcala
- La exploración del Gran Acuífero Maya, la mayor cueva inundada del mundo encontrada a principios de enero en la Península de Yucatán, ha revelado restos de fauna extinta de unos 2,6 millones de antigüedad y un centro de peregrinación ritual maya
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de febrero de 2018.- Tras 14 años intentando encontrar una conexión entre dos sistemas de cuevas inundadas en Tulum (en el Estado mexicano de Quintana Roo), un grupo de espeleólogos subacuáticos halló a principios de año el Gran Acuífero Maya, la mayor cueva sumergida del mundo con 248 cenotes y 347 kilómetros de pasadizos.
De acuerdo con la confirmación de El País, se emcniona que “El lugar tiene 248 cenotes [entradas] y 198 contextos arqueológicos (…) Es abrumador, sin duda el sitio arqueológico sumergido más importante del mundo”, ha explicado Guillermo Anda, investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México y director del grupo investigador Gran Acuífero Maya, a EFE.
En este laberinto de 347 kilómetros se han encontrado huesos de fauna extinta del Pleistoceno, que abarca las últimas glaciaciones, como especies de elefantes ya desaparecidas, perezosos gigantes y osos de hasta hace 2,5 millones de años.